Pablo Bustamante, líder del PVEM en la entidad, va de resbalón en resbalón y de traspié a traspié.
Aquello de “lo de mal inicia, mal acaba” embona perfectamente al zigzagueante político, que llegó hace tres años al Cabildo de Benito Juárez de la mano del PRI y que ahora quiere seguir (y como síndico) encaramado a Morena.
Uno de sus primeros “osos” fue cuando negó la relación de Nacho Sanchez, el ultimado aspirante a alcalde de Puerto Morelos, con el PVEM.
Luego se puso a hacer campaña por su lado para “reforzar” a la planilla de Juntos Haremos Historia de Cancún, pero en realidad, le salió el “chirrión por el palito” al convertirse en uno de los blancos favoritos en redes sociales.
Por si fuera poco, justamente, al arranque de la campaña, le estalló su relación con el “Cartel del Despojo”, lo cual jamás aclaró y su única respuesta en reiterar que es víctima de “guerra sucia”
Y para “cerrar con broche de oro” ahora pretende sacarle raja política al atentado que sufrió la candidata a alcaldesa de Puerto Morelos, Blanca Merari Tziu.
Con “Pablito” sí que aplica aquella que “calladito te ves…”