A una semana de las elecciones, Movimiento Ciudadano se asoma como la gran decepción en Quintana Roo, en contraste a lo que ocurre en el contexto nacional con el partido “naranja”
En todo el País, MC se perfila para ser la tercera fuerza, frente a las coaliciones del Morena y Verde y PAN y PRI.
Pero, además en la elección de gobernadores, ya se les señala a los “naranjas” como ganadores en Nuevo León y casi-casi, Campeche, y segundos lugares en un par de estados, mientras que en alcaldías se estarían llevando, entre otras, nada más y nada menos que Guadalajara y Monterrey.
De hecho, en esta elección intermedia federal, Movimiento Ciudadano se prepara para irrumpir con “tercero en discordia” en el escenario electoral rumbo a la sucesión presidencial.
Pero en Quintana Roo, los de naranja “ni pintaron ni dieron color”.
De hecho, para el presente proceso electoral, Movimiento Ciudadano llegó dividido y el actual dirigente, José Luis “Chanito” Toledo, además con graves problemas de credibilidad, luego que los comicios locales intermedios de 2019 dejaron “colgados” a casi todos sus candidatos
Es casi un hecho, que en MC en Quintana Roo no quedó como tercera fuerza, superados por Fuerza por México y se ve muy remoto, casi imposible, que ganen alguna presidencia municipal.
Para muchos, Movimiento Ciudadano en Quintana Roo jugó a ser un aliado a “escondidas” (“vergonzante”) de la “22 de Enero”.
En el mejor de los casos, en Quintana Roo Movimiento Ciudadano saldrá con un puñado de regidurías, pero con un futuro muy comprometido en la entidad.
Los naranjas quedaron despintados en Quintana Roo.