Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- Una investigación internacional reveló este lunes que al menos 50 personas cercanas al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aparecieron en una lista como potenciales objetivos de espionaje con el software Pegasus antes de las elecciones de 2018.
La familia de López Obrador, sus asistentes, colaboradores y hasta su cardiólogo están en el registro de algunos clientes de la empresa israelí NSO Group, encargada de vender la licencia de Pegasus a gobiernos de todo el mundo. Sin embargo, el reportaje no pudo confirmar que sus números telefónicos hayan sido intervenidos con éxito.
Entre los actuales integrantes y exfuncionarios del gobierno de López Obrador se encuentran Alfonso Romo, exjefe de Gabinete, Julio Scherer Ibarra, consejero jurídico, y Jesús Ramírez, vocero de su administración.
De acuerdo con la publicación el presidente López Obrador no solía utilizar con frecuencia su teléfono durante sus giras, confiando en los dispositivos de sus asistentes y colaboradores, que también permanecían como objetivos de espionaje.
El reportaje expone que también se seleccionó a Claudia Sheinbaum, persona cercana al presidente López Obrador y quien posteriormente se convertiría en la jefa de gobierno de la Ciudad de México.
“Siempre pensé que el antiguo régimen nos estaba espiando con fines políticos. El espionaje político se utilizó como una forma de persecución que es ilegal. Hoy en día, la inteligencia se utiliza para reducir la violencia y el crimen de manera legal”, declaró Sheinbaum cuando fue consultada por el diario.
El domingo, The Guardian y otros medios internacionales revelaron la existencia de un registro de 50 mil números telefónicos seleccionados como posibles objetivos de espionaje.
Más de 15 mil de los 50 mil números incluidos en la lista son de origen mexicano; la investigación expone que entre esos se encuentran los teléfonos de políticos, líderes sindicales, periodistas y activistas sociales.
La cantidad de números de México (15 mil) que aparecían en el listado de Pegasus supone una falta grave de regulación en materia de cibervigilancia según especialistas consultados para el reportaje.
El diario indicó que México fue uno de los primeros países en adquirir Pegasus a NSO, con lo que se convirtió en una “especie de laboratorio” para el espionaje de activistas, periodistas y defensores de derechos humanos.
En el registro también apareció el nombre del expresidente Felipe Calderón y su esposa, Margarita Zavala. Incluso, la exprimera dama recordó que recibió mensajes “sospechosos” después de anunciar su candidatura presidencial.
Junto a políticos y periodistas, se consideró como objetivos a integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes, institución que se encargó de realizar un reporte sobre los normalistas de Ayotzinapa. Según concluye la investigación, familiares de los estudiantes desaparecidos también eran sujetos de espionaje con el software Pegasus.
Con información de Latinus.us