Por Guadalupe Villarreal/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.-Tras el cierre de todas las escuelas por la pandemia de COVID-19, los Centros de Atención Múltiple (CAM) en Benito Juárez han pasado por lo peor: robos, vandalismo y huracanes que llevo prácticamente a dejarlos desmantelados, y no hay fecha para su rehabilitación.
“Aquí se les cayó la barda cuando pasó el huracán del año pasado y desde que se cerraron las escuelas a esta le robaron cables, le han robado, por la parte de atrás les han reforzado las rejas porque hasta eso se han intentado llevar”, comentaron vecinos bajo anonimato por temor a represalias de los vándalos de la zona.
El CAM ubicado a un costado del gimnasio deportivo Jacinto Canek, pese a que se encuentre en centro de la ciudad y cercano al palacio municipal, es al que le ha ido peor, ya que se robaron hasta el cableado, muebles de baño. Destrucción total.
La maleza, falta de vigilancia y la nula atención por las autoridades deja a la intemperie la educación de los niños con alguna discapacidad ya que no existe fecha en específico para la limpieza y mantenimiento de sus centros de estudio, pese a que se trabaja en una recuperación de escuelas en todo el estado.
El plantel de la región 230 sobre la calle 89, no cuenta con una barda desde el paso del huracán Gamma y Delta y en donde son los mismos ciudadanos e intendentes los que se han dado a la tarea de cubrir con mallas recicladas de alambre para impedir que siga siendo víctima de la delincuencia.
En sus alrededores, a las mallas metálicas se les puede observar las marcas donde han intentado arrancarlas prácticamente de sus bases de concreto.
