Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- Un par de semanas antes de que concluyera el sexenio de Roberto Borge Angulo, el 14 de septiembre de 2016 se inauguró de manera apresurada el tan polémico Auditorio del Bienestar, con una inversión de 245 millones de pesos, que hoy junto con otras obras millonarias es un gran elefante blanco.
Opacidad, presupuestos inflados, entre otras irregularidades fueron denunciadas desde que inició la obra, de lo que sería un enorme recinto de espectáculos, en el que habrían de realizarse eventos deportivos, culturales e incluso de charrería y que en toda la administración de Carlos Joaquín González nunca se usó.
Durante los primeros meses de la administración actual se habló de las opciones que existían para recuperar el recinto, entre ellas hacer una segunda inversión, que constaba de varios millones pesos, esto porque se hizo con una gran cantidad de fallas en las instalaciones o en su caso concesionarlo a la Iniciativa Privada.
Al final ninguna de las dos opciones se cristalizó y hoy parece haber quedado como la mayor herencia del ex gobernador, proyecto que el actual mandatario no pudo rescatar.
En el caso del Poliforum Benito Juárez, se trata de un espacio deportivo inaugurado en el sexenio de Félix González Canto, esto en noviembre de 2008, convirtiéndose en la sede del equipo de básquetbol Pioneros de Quintana Roo.
Sin embargo, durante el sexenio de Roberto Borge, comenzaron las denuncias por el despilfarro que se estaba cometiendo contra el erario público a través de los tres equipos deportivos profesionales que se encontraban en el Caribe mexicano, Atlante, Pioneros y Tigres, el de fútbol, básquetbol y béisbol respectivamente.
Entregas “por debajo del agua” de aproximadamente 800 millones de pesos y sin que los beneficiarios estuvieran obligados a comprobar, dejaron al descubierto el prácticamente nulo mantenimiento del espacio, algo que prevaleció en la reciente administración.
Fue en agosto de 2019 cuando los Pioneros no pudieron debutar en la Liga Nacional de Baloncesto Profesional de México (LNBP), debido a que no cumplieron con las condiciones indispensables, como contar con la infraestructura adecuada para garantizar un alto nivel competitivo.
En sus últimos meses de funcionamiento, el espacio fue rentado a diferentes grupos religiosos; con un promedio de renta de $35,000, sin embargo, al parecer esos recursos no fueron suficientes para darle el mantenimiento y al final quedó totalmente en desuso.
Y por último el Complejo Administrativo del Gobierno del Estado, ubicado en la avenida Huayacán, inaugurado el 12 de septiembre de 2016, dos días antes de inaugurarse el Auditorio del Bienestar, con una inversión de 100 millones de pesos, destinado a albergar oficinas de diversas dependencias estatales.
Este espacio requirió también una inversión para rehabilitar una buena parte de las instalaciones, porque había desde filtraciones de agua, hasta carencia de energía en algunos espacios y albergó durante un tiempo a la Secretaría de Ecología, entre otras direcciones.
Sin embargo, la falta de transporte público y la larga distancia para llegar desde cualquier parte del municipio, dificultó la operatividad del espacio y hoy se le nota en toda su infraestructura un desgaste total, de una obra más, millonaria y desperdiciada.