Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- Elementos de la Policía Municipal y funcionarios del Ayuntamiento de Benito Juárez acudieron al fraccionamiento Paraíso Cancún, para reforzar las acciones para intentar derrumbar la barda perimetral y la caseta de vigilancia, mientras que los vecinos del lugar trataban de evitar que se lleve a cabo esa diligencia
Un grupo de vecinos conformados por voluntarios de las 370 familias del fraccionamiento, que suman un aproximado de mil 400 habitantes de la Región 317, están a la espera que se resuelva a favor la demanda de la que es objeto, por tratar de frenar los actos vandálicos y de la delincuencia a la que se han visto envueltos, con la construcción de una barda perimetral y una caseta de vigilancia; sin embargo, el descontento de algunos habitantes del lugar que a su decir están siendo beneficiadas por el tráfico de influencias ha causado una serie de confrontaciones con la ley.
El señor Omar, habitante del fraccionamiento menciona que desde hace aproximadamente dos años, una de las personas que está en contra de la organización, construcción y puesta en marcha de las medidas preventivas, debido al cobro de una cuota de recuperación para el mantenimiento, que han propuesto para mantener su integridad y la de sus familias, al parecer haciendo uso de su profesión de “licenciada” ha solicitado través de un juez un amparo, que a su vez fue negado, por lo que a través de una revisión de un magistrado que les da el fallo a favor continúa con la convicción de demoler la barda y derrumbar la caseta de vigilancia construida en el fraccionamiento.
Es de destacar que el fraccionamiento se ha vuelto en una serie de infortunados casos de robo a casa-habitación, robo a mano armada, asaltos e inclusive han acudido a tirar cuerpos de personas ejecutadas entre otros delitos de alto impacto, por lo que la preocupación por mantener la seguridad de las familias originó la creación de este comité de seguridad.
A pesar de tratar de mediar la situación, los inconformes trataron de buscar una solución con la quejosa, sin embargo, ésta se negó y sin quitar el dedo del renglón, demandó a la Dirección de Desarrollo Urbano, haciendo una triangulación de la situación y ver por sus propios intereses, por lo que los colonos metieron un amparo para mantener la barda perimetral y la caseta de vigilancia y que no sean derrumbados.