Agencias
CANCUN.- Personal de la Coordinación General de Puertos y Marina Mercante visitó el muelle que en tiempo récord levantó personal al servicio del Grupo Caveri Servicios Inmobiliarios, al que no les importó caer en desacato cuando el Capitanía de Puerto regional les detuvo las obras hace una semana.
Al parecer, ahora sí la Marina decidirá qué empresa es la invasora, si la marina Chac Chi, con más de 20 años en el mismo lugar, o la de Ricardo Antonio Vega Serrador, el llamado “Zar de las Gasolinas”, que hace cuatro años, al amparo de la noche, se instaló en el lugar, empezando un litigio que se sigue en tribunales.
Al término de la visita, el personal de la Marina Mercante no quiso declarar y solo midieron el muelle de Chac Chi y pidieron la documentación de ambas partes; la primera cumplió, y quedó la duda de qué habrán entregado los empleados de Vega Serrador, quienes dialogaron con los enviados federales.
El muelle, fue hecho al amparo de las sombras de la noche, “como si se tratara de delincuentes, tal y como siempre se ha portado la gente al servicio de Ricardo Antonio Vega”, recordó un integrante de Chac Chi que pidió el anonimato por temor a represalias.
Hace casi cuatro años, el Grupo Caveri reclutó a cerca de 50 personas de Guerrero y Veracruz para tomar por asalto el predio de la marina Chac Chi, lo que en su momento puso en riesgo el sustento de 200 familias que dependen de la operación de la empresa localizada en la zona turística de Cancún.
El desacato se configuró el domingo en la madrugada —pues se sabe que las figuras jurídicas le valen a Vega Serrador, acostumbrado a comprar autoridades—; horas antes, personal de la Capitanía de Puerto detuvo la obra, que fue reiniciada una vez que se retiró, porque no se mantuvo una guardia permanente.
Los trabajadores contratados que trabajan al amparo de la ilegalidad, alertan sobre operativos policiacos—, pues durante el domingo, la mañana del lunes y el martes 14 de diciembre la construcción del muelle se llevó de forma acelerada, pese a las rondas de vigilancia de personal de la Capitanía.
Personal de la marina Chac Chi, ubicada en el kilómetros 3.2 del bulevar Kukulcán, a un costado de lo que fueran las Villas Juveniles del Crea (Consejo Nacional de Recursos para la Atención de la Juventud), en la Zona Hotelera, documentó las obras, no solo de construcción, sino también de dragado.
La denuncia por presuntos delitos ambientales fue interpuesta el lunes ante la Fiscalía General de la República (FGR), y físicamente ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), pues el sábado se hizo en forma virtual, cuando una cuadrilla empezó la colocación de pilotes para el muelle.