El proyecto del hostal de palafitos Mayan Money sobre el sistema lagunar Nichupté pinta de cuerpo entero la “preocupación” del Gobierno federal en la problemática ambiental de Quintana Roo.
La realidad es que al presidente Andrés Manuel López Obrador parece importarle poco, o nada, la protección del medio ambiente de Quintana Roo.
Ya ha pasado la primera mitad del actual gobierno y oficinas como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Procuraduría Federal del Medio Ambiente (Profepa) y la Comisión Nacional de áreas Naturales Protegidas (Conanp) en los hechos no existen en la entidad.
Al mismo tiempo, el superdelegado, Arturo Abreu Marín, ha carecido de liderazgo para que estas oficinas de protección al ambiente funciones como la “gente”.
Activistas han presentado recursos contra los palafitos del Mayan Money, pero los quintanarroenses están en total desamparo en la protección de sus recursos naturales.
Y por si fuera poco, nadie, ninguna autoridad, sale a decir que pasa con el polémico proyecto sobre el sistema alguna Nichupté.
En tanto, los palafitos del sistema lagunar Nichupté avanzan en la opacidad y, sobre todo, en el medio ambiente que no es una materia del Gobierno federal.