Por Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN. – La inseguridad ya es alarmante, un claro ejemplo es lo que se vive en la playas que están tomadas prácticamente por la delincuencia organizada, declaró Iván Ferrat, presidente del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe (CCE).
Si esto sigue creciendo, agregó, se va a desincentivar la inversión tanto nacional como extranjera, porque el destino dejaría de ser atractivo.
“Sí hay extorsión, peticiones de derechos de piso y ya es alarmante. Con lo duro que ha sido la pandemia, que venga la delincuencia organizada a terminar de matar a los negocios, ha obligado a tomar a algunos socios a tomar decisiones difíciles, de cambiar de giro… A los que les ha ido mal que trabajan en las playas, algunos han pensado ya en vender el negocio”, confirmó.
La realidad, dijo, es que se requiere de mayor estrategia y trabajo conjunto, mucho más trabajo, la entrada ya del C5.
En lo que va del año, dijo, conoce menos de 10 casos, pero es preocupante, sobre todo luego de un año tan difícil.
“Precisamente se complicó con la pandemia, porque por una parte las empresas dejaron de recibir los ingresos que recibían normalmente y aparte llega la delincuencia que también les pide cuota, allí es donde se rompió el paso”, reiteró.
El foco rojo, insistió, son las playas, pero también en la zona centro, en comercios de todo tipo, se han dado casos de extorsiones; y es que ante la falta de turistas, opinó, los delincuentes dejaron de vender a los turistas y se “diversificaron”.