Por Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- Desde la construcción irregular de muelles, hasta la colocación de baños portátiles que derramaron aguas negras e incluso huelga de empleados e incumplimiento en el pago de impuestos, son algunos de los polémicos temas que rodean a la empresa Ultramar, de Germán Orozco, pero su actividad monopólica ha sido siempre la denuncia principal.
Apenas hace unos días la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) determinó que no existen condiciones de competencia en seis rutas del servicio de transporte marítimo de pasajeros en ferris en Quintana Roo; con origen y/o destino Isla Mujeres a Puerto Juárez, Gran Puerto, playa Tortugas, Caracol y El Embarcadero, así como de Cozumel a Playa del Carmen.
Y es que en los últimos años la empresa Ultramar ha incrementado constantemente sus tarifas, incluso en plena crisis por el COVID-19, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), autorizó el año pasado un incremento en el costo de los boletos para la ruta a Cozumel, sin importar la inconformidad que presentaron empresarios y ciudadanos.
Este último incremento dejó los costos entre Cozumel y Playa del Carmen en 500 pesos el boleto redondo, cuando antes costaba 400, mientras que el sencillo pasó de 200 a 250 pesos. En la clase premier también subió a 600 pesos la tarifa ida y vuelta y esto motivó que la empresa Winjet también aumentara sus precios.
“La Autoridad Investigadora concluyó preliminarmente que hay elementos para determinar que no existen condiciones de competencia efectiva en los 2 mercados relevantes definidos… No hay condiciones de competencia en las rutas de Isla Mujeres-Puerto Juárez y Cozumel-Playa del Carmen”, resolvió la Cofece en el extracto del dictamen preliminar del expediente DC-001-2020, emitido el 4 de febrero de 2021 y publicado el jueves en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
En noviembre de 2016, por ejemplo, la comisión multó a la empresa Ultramar y a otras dos navieras en el mercado de transportación por ferries, por 45.2 millones de pesos. Y de confirmarse el sentido del Dictamen Preliminar, la autoridad reguladora del sector podría establecer las bases de regulación tarifaria en el servicio.
“Durante el periodo investigado (enero de 2015 a julio de 2020), se observó la entrada de varias empresas al mercado, sin que Magna haya reducido sus tarifas como una respuesta natural a la competencia. Actualmente sus únicos competidores (uno en Isla Mujeres y otro en Cozumel) mantienen una estrategia de seguimiento de precios (siempre por debajo de los de Magna) sin generar realmente presión competitiva”, añadieron en el informe.
Pese a estos constantes incrementos en sus tarifas, a mediados de diciembre, la empresa dejó de prestar el servicio entre Puerto Juárez e Isla Mujeres, luego de que los trabajadores se fueran a huelga ante la falta de pago de su quincena, lo que ocurrió luego de que se les congelara las cuentas ante la falta de pago por derecho de saneamiento.
A mediados de 2020 el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de la Riviera Maya, Lenin Amaro Betancourt, había solicitado ya una investigación por parte de la Cofece, a las navieras Ultramar Ferry y Winjet, por incremento de tarifas, para que se apeguen al estricto objetivo y no se cayera en actos monopólicos, por ponerse de acuerdo para incrementar tarifas, impactando en el bolsillo de cozumeleños y playenses que tienen la necesidad de cruzar todos los días.
Entre otra de las polémicas, fue en octubre de 2019 cuando se colocaron baños portátiles en el muelle de Puerto Juárez, lo que provocó el escurrimiento de químicos dañinos para el medio ambiente, denunciado por vecinos por la pestilencia que se generó en el lugar, además de la contaminación con aguas negras que empezaban a dañar la arena y el agua de la playa.
Pese a las irregularidades, los incrementos y denuncias constantes de los usuarios, la empresa ha continuado acaparando el mercado e incumpliendo con elementos tan esenciales, como lo son los protocolos sanitarios, principalmente el de la sana distancia.