Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN. – Por lo menos 15 instituciones financieras han sido suplantadas a nivel nacional, ofreciendo créditos inmediatos y que ponen en riesgo a los usuarios debido a que les piden datos personales o incluso depósitos para asegurar sus créditos y no hay forma de que recuperen el dinero.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), detalló que 15 instituciones financieras denunciaron ya la suplantación de su nombre fiscal e incluso de algunos datos fiscales o administrativos, con lo que pueden implementar su modus operandi para engañar a todo aquel interesado en algún tipo de crédito.
“Los afectados señalan que los contacta una persona vía telefónica o por redes sociales ofreciéndoles un crédito inmediato y con mensualidades de montos pequeños para hacerlos atractivos. Utilizan información co razón social, dirección, teléfono o imagen corporativa de las entidades autorizadas y registradas. Y solicitan información personal vía whatsapp, poniendo en riesgo los datos personales”, detallaron.
Pero además de los datos personales, la mayoría pide anticipos de dinero en efectivo o depósitos, supuestamente para gestionar el trámite, adelanto de mensualidad, gastos de apertura o como fianza, que generalmente es del 10 por ciento del total del crédito, por lo que puede ir desde 1,000 hasta 200,000 pesos. Desafortunadamente luego de estos depósitos, evidentemente no hay ningún crédito, es imposible localizar a los promotores y es cuando descubren que fueron engañados.
Ante esto, la CONDUSEF emitió una serie de recomendaciones como: evitar contratar créditos o préstamos a cualquier entidad que pida un anticipo, asegurarse de que la entidad está registrada en SIPRES y corroborar todos los datos, no proporcionar dinero antes de haber recibido el crédito, no entregar documentos personales o datos de tarjetas bancarias, no realizar operaciones ni proporcionar información por redes sociales como Facebook o whatsapp, no firmar nada sin antes haberlo leído detalladamente el contrato y si se utiliza Internet como medio de contacto, corroborar que la página es segura.
