Por Alejandro Peza/NOTICARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- Un informe del Observatorio Legislativo de Quintana Roo reveló que entre los diputados de la XVI Legislatura hay altos niveles de ausentismo e iniciativas huecas, repetitivas o que son competencia de la Federación.
Según el Censo Nacional de Poderes Legislativos Estatales el Congreso de Quintana Roo ejerció un presupuesto de 439.9 millones de pesos lo que posiciona a esta legislatura dentro de la lista del “Top Ten” de los congresos estatales más caros del país.
Por el contrario el estado de Quintana Roo posee uno de los Congresos con menor número de diputados en el país, pero también es uno de los más caros, debido a que en 2019 obtuvo la octava posición de los Legislativos estatales con mayor presupuesto otorgado, de acuerdo con información presentada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En contraste, el Congreso local se va hasta la posición 24 a nivel nacional en cuanto a número de integrantes, conformado por 25 diputadas y diputados, lo que significa que el año pasado cada legislador costó a los quintanarroenses 17.5 millones de pesos.
La XVI Legislatura comenzó a operar desde marzo de 2019 y terminará su período en marzo de 2022, actualmente está conformada por nueve diputados de Morena, tres del PVEM, tres del PT, cuatro del PAN, dos del PRD, dos del PRI, uno de Movimiento Ciudadano y uno de partido local Movimiento Auténtico Social (MAS).
Sin embargo, durante el segundo período del año legislativo los congresistas han alcanzado menos del 80% de asistencia a su trabajo y la cámara tiene diputados que durante todo el período sólo han presentado dos iniciativas y en otros casos solo una como el legislador del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Erick Gustavo Miranda García, que este 4 de septiembre fue nombrado como el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo).
Para el Observatorio Legislativo de Quintana Roo, el problema de productividad de los diputados de Quintana Roo es grave debido a que se trata del presupuesto público el que paga estos salarios y beneficios que los mantiene en un puesto de elección popular.
Lo peor del caso es que la pandemia afectó aún más la productividad de los diputados quintanarroenses y se reflejó en el segundo período del primer año legislativo donde normalmente los diputados deben reunirse entre 30 y 32 veces en sesiones y solo lograron hacer 16; también se aplicaron períodos extraordinarios, pero por la inasistencia y la falta de coordinación entre fracciones parlamentarias de algunos congresistas estas fueron suspendidas.
En el análisis realizado por la organización civil Observatorio Legislativo se contabilizaron las iniciativas que han presentado desde 2019 a la fecha. Uno de los diputados que más iniciativas presentó fue José Luis Toledo Medina, del partido Movimiento Ciudadano, con 19, seguido de Edgar Humberto Arceo de Morena con 10 iniciativas; María Cristina Torres Gómez del PAN con 10 y su homóloga Teresa Atenea Gómez Ricalde con nueve.
El número de iniciativas es alto en comparación con otros períodos legislativos, sin embargo, la calidad de las iniciativas son bajas debido a que hay iniciativas que se repiten en su concepto porque están dividiéndola para que se aplique en cada ley hacendaria de cada municipio, algunas otras iniciativas son de temas que no corresponden al congreso del Estado sino que son temas federales que no van a proceder.
Un dato relevante es que hasta ahora no existen mecanismos que sancionen prácticas relacionadas con la baja productividad de legisladores locales.