
Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- La actividad turística, principal motor económico del estado, festeja casi diariamente nuevos récords. Atrás quedó la recuperación post COVID, y ahora ya se trata de superar todos los números históricos.
Un ejemplo lo da el aeropuerto de Cancún. En 2022 rompió todos los récords y alcanzó los 30 millones 342 mil pasajeros, un 36% más que 2021.
En enero de 2023 recibió 32% más pasajeros que en enero de 2022. Casi 2 millones 900 mil pasajeros. O sea, se viene un nuevo récord histórico.
Pero la otra cara de la moneda son los trabajadores quintanarroenses, que aún viviendo en uno de los estados más prósperos del país, ganan 15% menos que los trabajadores del resto de México.
LOS DATOS DUROS
La información surge del propio Plan Estatal de Desarrollo (PED) 2023-2027, que lo toma como uno de los principales retos para el Gobierno de Mara Lezama.
El documento (ver abajo) reconoce que “Quintana Roo presenta una contradicción fundamental que incide en el bienestar de la población trabajadora. El Estado tiene la mayor captación de divisas por turismo en el país y al mismo tiempo tiene un nivel de ingreso menor a la media nacional”.
Y da los números:
“El ingreso promedio de las y los trabajadores quintanarroenses, al mes de septiembre de 2022, fue de 12, 275 pesos mientras que el promedio nacional fue de 14,419 pesos, lo cual representa una brecha de 2,144 pesos”.
“Adicionalmente, las mujeres quintanarroenses presentan una mayor desventaja, con un ingreso mensual promedio de 10,521 pesos, representando una diferencia de 1,786 pesos frente al salario mensual de los hombres, que se ubica en 12,289 pesos».
En el comparativo entre entidades turísticas la situación es peor; en Quintana Roo se gana 50% menos que en Baja California Sur.
Y eso es apenas un promedio. Si se toman como base los sueldos más bajos de la industria, como Steward, camarista o auxiliar de limpieza, ganan menos de 6 mil pesos mensuales, y aún trabajando quedan estadísticamente por debajo de la línea de la pobreza.
REDISTRIBUCIÓN
Según el propio PED, la derrama turística del estado en 2022 superó los 10 mil 700 millones de dólares y los datos preliminares de 2022 hablan de 11 mil 700 MDD.
Son alrededor de 230 mil millones de pesos, pero que quedan en pocas manos.
La propuesta de la gobernadora Mara Lezama para su quinquenio (ver abajo) es hacer crecer más de un 100% la derrama, y propone un proyecto de “prosperidad compartida” para hacer una mejor redistribución de los recursos.
Para ello, los hoteleros ya firmaron el “Nuevo Acuerdo para el Bienestar y Desarrollo”, pero aún no queda claro qué medidas se van a implementar para equilibrar la balanza. El aumento de impuestos y derechos vinculados a la industria para destinarlos a desarrollo social es un primer paso, pero no llega de manera directa a los trabajadores.
Los hoteleros y empresarios turísticos tienen prácticamente garantizada la continuidad de su éxito. El estado les financia la promoción con más 700 millones de pesos anuales.
Ahora, la “contraprestación” de la industria turística debería ser subir los sueldos de los trabajadores.
Pero hasta hoy nadie ha hablado de este tema.
Con información de La Opinión QR