Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- A un mes que inició la Fase 3 de la pandemia, trabajadores del Instituto Nacional de Migración (INM) en Quintana Roo, denunciaron que van más de 5 empleados que dieron positivo a COVID-19 y el titular de la Oficina de Representación en la entidad los obliga a continuar en horarios normales.
Igualmente denunciaron que no han cesado las presiones y amenazas de que han sido objeto por parte del titular, y también de sus asesores que, sin pertenecer al INM, se pasean en las oficias a nombre del delegado y los obligan a trabajar, incluso horas extras, para continuar con los cobros ilegales en la mayoría de los trámites migratorios solicitados por los extranjeros.
“Hemos denunciado ante la Secretaría de Gobernación sobre los abusos que hemos sufrido por parte del titular Ángel Ramírez Florescano, y los actos de corrupción de los que nos quieren hacer parte, pero hasta el momento la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero sigue sin ordenar ningún cambio; en los próximos días levantaremos nuestras voces ante el presidente de la República si no se toman medidas al respecto”, concluyeron.
Y es que, no obstante que desde la Presidencia de la República, mediante decreto publicado el 21 de abril de este año, se ordenó la reducción de horarios y personal en la oficinas gubernamentales, el INM ha hecho caso omiso de las medidas de prevención ante la pandemia, lo que ha ocasionado que varios de los empleados hayan contraído COVID-19, y ellos mismo sigan contagiando a todo aquel que llegue a darle seguimiento a sus trámites migratorios.