Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- El secretario de Seguridad Pública del estado (SSP) Lucio Hernández, retrocedió el almanaque un año, y, como lo hizo el gobernador Carlos Joaquín en aquel momento, deslindó al Gobierno del estado de toda responsabilidad sobre la represión a la marcha feminista del 9 de noviembre de 2020, que dejó mujeres heridas y detenidas.
En una entrevista en el programa Denuncia Ciudadana, de Radio Turquesa, el titular de la SSP se “lavó las manos” de los hechos, y dijo que quienes reprimieron fueron los policías municipales.
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Según el funcionario, el deslinde surge de una investigación de Asuntos Internos de la SSP, que es una dependencia de la propia Secretaría.
Según Lucio Hernández, de esa investigación “se logra desprender que no hubo elementos adscritos a la secretaría de Seguridad del estado en los hechos”.
O sea, según esa versión, todo lo hicieron los policías municipales.
El funcionario reconoció, sin embargo, que en ese momento había Mando Único estatal, lo que es una contradicción que parecía haber quedado resuelta hace un año.
“En virtud de tratarse el gerenciamiento policial del mando único, la estrategia era conjunta”, dijo.
Luego, en la mañanera del 10 de noviembre de 2020, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que la responsabilidad era del Mando Único estatal, y el gobernador rectificó su postura y asumió la responsabilidad.
De hecho, en el mismo programa radial de hoy, minutos después, Mara Lezama recordó que el Estado destituyó a Alberto Capella luego de esos hechos, que era el principal responsable de la seguridad.
Con información de La Opinión de Quintana Roo