Por Tony Rivero/NOTICARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- En momentos de crisis económica por la pandemia del COVID-19 se busca por parte de los consumidores que cuenten con productos de la canasta básica no suban de precio y que sean de buena calidad, sin embargo el Sistema Nacional de Información e Integración de mercados a dado a conocer que Cancún se colocó en los primeros lugares de ofrecer las tortillas de maíz más caras del país, solo por debajo de Sonora. Y la calidad deja mucho qué desear porque la mayoría está hecha a base de harina industrializada.
Los costos por kilo en Benito Juárez es de 20 pesos, y en autoservicios en 11 pesos con 50 centavos; en Chetumal, el kilogramo cuesta 18 pesos, y en supermercados en 11 pesos con 50.
Julio Durán líder de los tortilleros en el sur del estado comentó que son diferentes las problemáticas que han sufrido en los últimos años, no solo por el tema de la pandemia.
Ya que se tuvo encarecimiento de materia prima y elevación de precios, lo cual provocó que a finales del 2019 se tuviera una elevación del costo al público.
En tanto el precio de 18 pesos que se tiene en Chetumal no compite con los precios que se generan en los centros comerciales que lo ofertan hasta 7 pesos menos.
Explicó que se han tenido ajustar a los semáforos que se han establecido por parte de las autoridades de salud y se busca que este alimento que es fundamental ara miles de familias en su dieta diaria sea de calidad.
En tanto el Sistema Nacional de Información e Integración de marcados daba cuenta de estudios que se han realizado en diferentes puntos del país donde el costo de este mis producto es de 22 pesos en estado del norte del país o disminuye a 15 pesos.
Pero también se explicó que la calidad del producto debe ser la adecuada en comparación con su precio, por ello, en Cancún se tiene tortillas caras e industrializadas que no son de nixtamal.
Se puntualizó que la tortilla en tiempos de COVID-19 sea de buena calidad y que cuente con un precio que vaya acorde a la economía decrementada de las familias que se han quedado sin empleo.