Por Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- El Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC) es uno de los espacios indispensables para reactivar la economía en Quintana Roo, pero también de los puntos más vulnerables frente al COVID-19, por lo que dentro del “Lineamiento Nacional para la Reapertura del Sector Turístico” se incluyó en el “Transporte aéreo” un listado de 171 puntos a seguir, para mantener las mejores condiciones sanitarias.
No obstante, el AIC, operado por Grupo Aeroportuario del Sureste (Asur) no dejó de operar pese a la cantidad de casos positivos y muertes por coronavirus.
En 27 grandes rubros que incluyen desde los mostradores, abordaje, el vuelo, el desembarco, hasta la entrega de equipaje, se deben seguir protocolos específicos, en los que además se requerirá de la capacitación de todo el personal involucrado para reducir el riesgo de contagio.
“Las medidas de sanidad e higiene para toda la operación, por destinos, colaboradores y eventos, deberán estar incorporadas en los contratos de todos los proveedores junto con protocolos de acción y reacción ante signos de contagio de enfermedades infectocontagiosas y otros riesgos sanitarios”, especificaron.
Se incluyen premisas de sanidad, para promover una cultura de salud e higiene entre el personal que labora en los aeropuertos. Medidas en aeropuertos para guardar la sana distancia en toda la infraestructura aeroportuaria, pasajeros, acompañantes y cualquiera que transite por el aeropuerto, debe usar cubre boca y el personal equipo de protección personal (PPE) como cubre boca, caretas/googles, guantes.
Destacaron también que, en las áreas de tránsito como los baños, debe haber remodelaciones para evitar contactos, sanitización constante; filtros de seguridad sin interacción física o con tecnología biométrica; mostradores con paneles de protección, destacando que:
“Se observa si el pasajero tiene algún síntoma similar a una gripe y/o problemas respiratorios (tales como fiebre, fatiga y tos seca), si es positivo entonces: Se le indicará que es necesario que lo revise el servicio médico del aeropuerto. Si el doctor lo libera, se le permitirá continuar su viaje. Si el doctor no le permite viajar, el Agente de Servicio al Pasajero notificará al Líder de Aeropuerto para que oriente al pasajero sobre su vuelo”.
Para la documentación y recepción de equipaje se establecieron procedimientos como: unifilas, paneles de protección, sanitización frecuente; para la sala de última espera: rediseñar espacios para la sana distancia; al igual que en los salones premier. En el proceso de abordaje se establecieron paneles de protección, abordaje dosificado de 10 en 10 personas, disposición de los viajeros el gate reader (lector de QR), para no realizar manipulación de los dispositivos del cliente. Y en el caso de tener que ser trasladados en el shuttle (oruga), cuando el avión no consiga puerta de entrada, establecer la distancia pertinente, y unidades grandes para tener una mayor distancia.
“Si la Tripulación de Sobrecargos detecta a un pasajero con síntomas o si el pasajero manifiesta tener algún problema médico: debe seguir los procedimientos operativos recomendados por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) con respecto a la gestión de sospechas de enfermedades transmisibles, como: ubicar al pasajero en un espacio donde tenga el menor contacto posible con la tripulación y pasajeros, la tripulación que tuvo contacto con el cliente, deberá tener un aislamiento voluntario por 14 días en casa o hasta que la pruebas den negativo.
También se incluyó el protocolo para la limpieza del avión en caso de incidencia, rediseño integral del servicio a bordo, sanitización de las aeronaves, medidas para personal de las aerolíneas en horarios escalonados, filtros sanitarios para lectura de temperatura, protocolos de monitoreo de casos sospechosos y positivos, experiencia del empleado, acciones médicas en general, servicio al cliente, así como comunicación interna y externa. Finalizando con las operaciones de carga o traslados de apoyos federales.