Lo ocurrido durante estos días en Tulum refleja de cuerpo entero que Quintana Roo enfrenta una de las mayores crisis en sus cuerpos policiacos.
El asesinato de la migrante salvadoreña, Victoria Salazar, en manos de policías mal entrenados -si es que alguna vez recibieron algún tipo de capacitación-, prendió las solicitudes de alerta de que algo muy malo estaba pasando con las instituciones encargadas con velar por la seguridad de los quintanarroenses y, también de ellos turistas que vistan la entidad.
Pero, además en Tulum, ha habido una secuencia de atentados, tiroteos, ataques y la delincuencia actúa sin el menor pudor.
Cuentan que ayer, las calles de Tulum estuvieron semidesiertas, tras tres ataques en menos de 24 horas.
La policía no aparece cuando se le necesita y cuando acude, es un desastre.
Se supone, que aún estamos bajo el esquema de Mando Único y Tulum, es uno de los formantes en este acuerdo impulsada por el Gobierno estatal
Como que ya es tiempo, que en el Gobierno y del estado y los municipios se pongan a revisar las estrategia del Mando Único.
Y sino pueden, que al menos avisen.