Algo extraño está ocurriendo en las mediciones de los decesos por COVID-19 en Playa del Carmen que lleva a cabo la Secretaría Estatal de Salud (Sesa).
Y es que desde hace ocho días, según el conteo diario de Sesa, no ha ocurrido un solo nuevo fallecimiento, mientras que en ese mismo periodo se han presentado 34 casos nuevos en esta ciudad de la Riviera Maya.
Pero, además, desde el 27 de abril solo se han registrado dos nuevos decesos, al tiempo que se han presentado 44 casos confirmados.
Previamente, del 26 al 27 de abril, en 24 horas, se presentaron cuatro decesos.
Pero, al parecer algo estaría fallando en las mediaciones de Sesa sobre el avance del COVID-19 en Playa del Carmen. De manera extraoficial, se reportan al menos otras cuatro muertes. Lo familiares y amigos cercanos de estas personas aseguran que fue por COVID-19.
Se trata de Mario Razo Corrales. expresidente del Colegio de Ingenieros; Pedro Méndez Sánchez. taxista del sitio de la Quintana Avenida con Constituyentes; el doctor César Ramírez Hernández, de los primeros médicos que se arraigaron en Playa desde hace 20 años, y el oficial Manuel de Jesús Espinosa Flores “Comandante Puma” de la dirección de Tránsito Municipal.
Los cuatro eran muy conocidos y apreciados en la comunidad playense.
Pero, lo que sería aún más preocupante es que podrían ser muchas más las víctima mortales de COVID-19 en Playa del Carmen, pero que no serían tan populares o conocidos en la ciudad.
Es inadmisible que se esté ocultando algo tan grave.