Lo de Cristina Torres era bola cantada.
Desde el inicio de los registros, el 31 de enero, ya había trascendido que Cristina Torres, había dado el paso y se había registrado en el proceso interno de Morena de elección de candidatos a presidentes municipales.
Los registros, como se sabe, fueron prácticamente en secreto, pues se llevaron a cabo “online” por la pandemia. Sólo se sabía de los que habían difundido su inscripción. Pero muchos casos “pasaron de noche”.
Y bajo las sombras del “online”, Cristina Torres presentó su solicitud para la nominación de Morena a la presidencia municipal de Solidaridad (Playa del Carmen), pero lo mantuvo en secreto, hasta que ya se pudo más.
Apenas, el miércoles pasado, al diputado de Morena, Fernando Chávez, se le quemaban las habas para anunciar la llegada de Cristina Torres a la bancada “guinda”, pero la hoy ex panista prefirió seguir retrasando el anuncio formal
Y, finalmente se cumplieron los “tiempos” y se supo que lo que todos sabían, que Cristina Torres, ya no contaba con el apoyo del “22 de Enero” y había decidido cambiar de barco.
Por cierto, ¿Qué criterio prevalecerá en Morena para definir a su candidato en Solidaridad ¿la encuesta o las decisiones políticas cupulares?
