Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- El diputado Julián Ricalde Magaña convocó a la ciudadanía a clausurar el próximo lunes las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), de manera simbólica, esto por las constantes fallas de energía y apagones que hay en el destino, principalmente en Isla Mujeres.
La situación que se vive en Isla Mujeres, dijo, es terrible, porque además de la mano de la electricidad está el agua y si no hay electricidad no se puede completar el ciclo para que llegue el vital líquido.
“Yo estoy convocando para el lunes a las 10 de la mañana, para ir a clausurar las oficinas de manera simbólica la Comisión Federal, porque todo mundo sabe igual que cuando llega el recibo hay que pagar y no hay averiguaciones que valgan y no hay forma de ganarles a nada, entonces si se va a volver la ley del monte, pues vamos a aplicarles la misma”, anunció en entrevista en un medio local.
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El problema, reiteró, es que estos apagones ya son constantes y la CFE no da una respuesta, no avisa a la población para que se prepare, incluso en un comunicado de la presidenta municipal, se indicó que la Superintendencia ya ni siquiera responde el teléfono, es decir, se entiende que eventualmente dado que solo hay una compañía de luz, puedan presentarse este tipo de eventos, pero lo lamentable es que ellos no comuniquen el problema que tienen.
“Porque es un problema que están ocultando, es un problema que todo el mundo sabemos, el cable de energía eléctrica submarino que dota la isla ya es insuficiente, tan es así que trajeron una turbina que está en la parte de lo que era el aeropuerto y es un escándalo en una isla tan pequeña, pero bueno, cuando menos eso sustituye eventualmente la capacidad, pero hoy ni siquiera eso; llevamos varios días en donde ya los apagones son frecuentes y obviamente por el calor que está haciendo es verdaderamente incómodo”, lamentó.
Pero a esto se le suma, denunció, las pérdidas económicas por las despensas en los refrigeradores, muchos restaurantes que tienen langosta, almejas, se pierden, y nadie sale a dar la cara, aunado al problema que enfrentan los hoteleros y la mala experiencia que viven los turistas.