Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
GUADALAJARA.- Luego de que el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, declaró que cuando la oposición acusa la existencia de baños de sangre en el país piensa en Guanajuato y Jalisco, el mandatario Enrique Alfaro le respondió que existe más violencia en 10 estados gobernados por Morena.
“Con los datos del Sistema Nacional de Seguridad, los datos que ha presentado el presidente de la República en sus visitas a Jalisco, (la entidad) está por debajo de la media nacional en la incidencia delictiva total”, señaló a través de un video.
Recalcó que, según datos del Sistema Nacional de Seguridad, en comparación con Jalisco “hay 10 estados gobernados por Morena que tienen una mayor tasa de incidencia delictiva total, donde están integrados todos los delitos”.
Con estadísticas en mano, Enrique Alfaro le dijo a Adán López que Jalisco está por debajo de la media nacional en homicidios dolosos. “Y antes que nosotros hay ocho estados gobernados por Morena con una tasa de homicidio doloso más alta que la de Jalisco”, apuntó.
Con relación al feminicidio, aseveró que Jalisco está muy por debajo de la media nacional mientras que 15 entidades gobernadas por Morena tienen una tasa más alta en dicho delito. La misma tendencia se repite con el secuestro, Jalisco abajo y 11 estados de Morena arriba.
“No puede un servidor quedarse callado ante un señalamiento como el que hizo contra mi estado, porque cuando yo pienso en Jalisco, pienso en que Jalisco es la locomotora de la economía nacional, el mayor productor agroalimentario de México (…) un estado en donde su gente lucha todos los días por sacar adelante a nuestro país”, comentó.
Respecto a la declaración del secretario, quien el pasado viernes acusó a Enrique Alfaro de negarse a intervenir para que senadores apoyen la reforma que prolongaría la participación de la Guardia Nacional en labores de seguridad hasta 2028, so pretexto que bebía vino con el embajador de México en España, Enrique Alfaro hizo una precisión.
“Cuando usted me llamó a España, lo hizo a través del teléfono del embajador de México, con quien en efecto estaba cenando. Me pidió que convenciera a senadores de votar a favor de su reforma.
“Lo que no entiendo, señor secretario, es por qué un gobernador debería de interferir en la dinámica de un poder como es el Legislativo, muy en especial, del Senado. Si usted quería incidir en la votación de los senadores de Movimiento Ciudadano, debió hablar con ellos.”
Lamentó que Adán López admitiera públicamente que le pidió intervenir para respaldar una reforma.