Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
- La falta de talento político ha provocado el problema interno en el partido, debido a que sólo se favorece a un grupúsculo que opera con viejas formas políticas para imponer sus intereses, señala el legislador.
- Espera que 2021 inicie con una dirigencia estatal nueva que sea acorde a los deseos de la militancia. Reconoce los meritos partidistas de la actual líder estatal del partido, Anahí González, para que pudiera seguir en el cargo.
CIUDAD DE MÉXICO.- El senador José Luis Pech Várguez confía en que el reclamo de los militantes de Morena de Quintana Roo inconformes con la designación de algunos de los dirigentes del partido en el estado, será escuchado y resuelto de forma satisfactoria por el actual Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del organismo político antes de que concluya el presente año.
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En entrevista, el legislador consideró que es legítima y entendible la toma de las instalaciones de Morena en la ciudad de Chetumal por un grupo de militantes que exigen la salida del nombrado Secretario General del partido en el estado, el notario Jorge Parra Moguel, y la destitución de la delegada del CEN en Quintana Roo, Liliana Castro Muñoz.
Señaló que “en Morena estamos pagando lo que ya dije en otras ocasiones: al haber invitado a personas con formas de hacer política diferentes, ahora esas formas las emplean para buscar adueñarse del partido, apoyados al viejo estilo por gente a nivel central”.
Es por ello, agregó, que es natural la reacción de los militantes de Morena en Quintana Roo, quienes se sienten agraviados y ahora buscan la forma de defender su partido. “No son pocos, se trata de muchos que ya hicieron labor en los tiempos en que no había recursos, por lo que ahora que Morena es una opción política con acceso al poder, los hacen a un lado para poner a gente desconocida y ajena al partido, que no cuentan con las características valiosas que tanto reconoce la propia militancia morenista”.
Pech Várguez estimó que esa es la razón por la que la dirigencia nacional del partido encabezada por Mario Delgado, debe de tomar pronto cartas en el asunto y resolver para avanzar de forma armónica, más aún si se considera que la creación de la actual dirigencia estatal y las protestas que ha desatado, “es resultado de una falta de talento político, lo cual ya se había advertido que podría ocurrir, pero aún así se empecinaron en favorecer a un grupúsculo nuevo que acaba de llegar al partido, por lo que ahora se están pagando las consecuencias de esas decisiones equivocadas”.
Dijo que es normal que en Morena, a diferencia de lo que ocurre en otros partidos, la dirigencia escuche a la militancia. “Cuando hay una reacción muy fuerte, lo normal es que se platique con los inconformes o los afectados para resolver. Estimo que va a ocurrir, porque ya está en puerta el proceso electoral, de tal suerte que es probable que antes de que concluya el año ya quede resuelto y así, para el año nuevo, ya se cuente con una dirigencia acorde a los deseos de la militancia”.
Cuestionado sobre el caso de Anahí González, la actual presidenta estatal de Morena, señaló que se trata de una militante que ha participado de forma muy activa desde la constitución del partido, de tal suerte que nadie objeta sus méritos para mantenerse como la líder del partido en Quintana Roo. Sin embargo, indicó que finalmente será la actual dirigencia nacional la que tendrá que decidir si cambia a toda la directiva o solamente a los que son el objeto de la actual inconformidad.
De la misma manera, el senador de Morena por Quintana Roo, propuso que si se va a poner un delegado o una delgada del partido en el estado para las próximas elecciones, tendrá que ser una persona que respete a la militancia y que pueda operar con todos, para fomentar la unidad que se requiere.