Por Javier Chumacero/NOTICARIBE PENINSULAR
PLAYA DEL CARMEN.- La crisis en la dirección del Registro Civil derivó en el cambio número 52 en el gabinete de Laura Beristain: salió Edwin Ávalos y entró Carlos Núñez, psicólogo de la alcaldesa, quien se desempeñaba como asesor.
La última polémica en esta área fue la acusación de dos secretarias sindicalizadas, de ser víctimas de acoso, amenazas, injurias y actos de violencia. El Sindicato del Ayuntamiento le pidió a Alfredo Paz Cetina, secretario general que pusiera orden en esa oficina.
Desde fines del 2019 ya había sospechas en el manejo de la operatividad. Tan es así, que previo a la pandemia del COVID-19, se realizó una auditoría por parte de la autoridad estatal.
Meses después y en pleno confinamiento, el ahora ex director despidió a tres mujeres por “pérdida de confianza”. Sin tomar en cuenta que una de ellas está certificada para realizar trámites de correcciones de la CURP, y hasta la fecha no ha podido sustituirla.
De hecho, Registro Civil tuvo que pedir a la ciudadanía que mejor llamara a un número telefónico en la Ciudad de México, para realizar este trámite. El propio personal ha revelado en corto algunas anomalías, como que un empleado que no tiene el cargo de juez, encabezó una ceremonia nupcial.
Al parecer, el recién nombrado director no cuenta con experiencia alguna en este ramo.