Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
ALEMANIA.- El ministro alemán de Sanidad, Jens Spahn, ha rechazado de pleno la idea de un regreso de los espectadores a los estadios de fútbol en Alemania. Sería “enviar una señal equivocada” a la sociedad mientras en el país sigue recrudeciéndose la pandemia de coronavirus.
En Alemania, con 218.00 casos positivos, temen que el fútbol pueda ser un foco de contagio en un momento crítico por el regreso de las vacaciones de otros países
En su cuenta de Twitter, el ministro germano considera que la presencia de “miles de aficionados en los estadios no coincide con la evolución actual” del número de infecciones que hay en el país, que son unos 218.000 casos positivos según el Instituto John Hopkins.
Spahn realizaba estas declaraciones a la salida de una reunión con los ministros regionales de Sanidad. “Ahora se trata de no asumir ningún riesgo que sea evitable”, señaló el ministro conservador. “Sentimos que debemos mantenernos vigilantes. En la situación actual, tener a miles de aficionados en los estadios sería enviar una mala señal”.
“Ahora se trata de no asumir ningún riesgo que sea evitable. En la situación actual, tener a miles de aficionados en los estadios sería enviar una mala señal”
La liga alemana de fútbol, la DFL, aboga por un regreso parcial del público a los estadios de la Bundesliga en la nueva temporada, que debería comenzar a mediados de septiembre. Con este objetivo, la DFL había presentado al Gobierno un protocolo detallado en julio.
Asimismo, a principios de agosto, los 36 clubs profesionales de Alemania, de Primera y Segunda División, se habían puesto de acuerdo con el modelo propuesto por la DFL. Entre las medidas propuestas se prohibían las localidades sin asiento (de pie), la venta de alcohol dentro de los estadios hasta octubre, y el desplazamiento de las aficiones hasta fin de año.
Aun así, el ministro Jens Spahn consideraba que el protocolo de la DFL era “bueno en teoría”, pero “lo que es decisivo es la “práctica en la vida cotidiana”.
Medidas propuestas
La DFL diseñó un protocolo que recogía la prohibición de las localidades sin asiento, la venta de alcohol y de los desplazamientos de aficionados
La aprobación del regreso del público por las autoridades ya no se preveía fácil antes de la reunión de los ministros federales. “El fútbol profesional no está en lo más alto de la lista de prioridades de los ministros de Sanidad”, había advertido la presidenta de la conferencia de los ministros regionales, Dilek Kalayci.
El presidente de Baviera, Markus Söder, también mostraba su escepticismo al indicar que “no sería inteligente tener a 20.000 o 25.000 personas dentro de los estadios” en un momento en que en su región volverán los niños a la escuela.
Rechazo de los médicos
También la Federación de médicos considera el regreso de los aficionados “un riesgo real de contagio masivo”
También se ha manifestado contra la reapertura de los estadios la Federación de médicos alemanes, el Marburger Bund. “El riesgo de contagio masivo sería real”, dijo la presidenta de la entidad, Susanne Johna, en el diario Neue Osnabrücker Zeitung.
Alemania ya ha decido que todos los grandes acontecimientos públicos permanecen prohibidos al menos hasta el 31 de octubre.