Por Alejandro Peza/NOTICARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- Un grupo de agentes de la Fiscalía General del Estado se reunió con diputados del Congreso del Estado para solicitar se atiendan sus peticiones de mejoras salariales y sus condiciones de trabajo.
El diputado Verde Ecologista, Gustavo Miranda y próximo presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado recibió a los agentes inconformes adelantándosele a la diputada Reyna Durán Ovando quien esperaba a que los policías terminarán de atender a los medios de comunicación.
En una pequeña manifestación al exterior del recinto legislativo en la ciudad de Chetumal los policías ministeriales revelaron una inequidad en el pago de estímulos y aportación de insumos, sobre todo para labores de riesgo.
Los policías inconformes señalaron que los agentes “foráneos” ganan un sueldo quincenal neto de ocho mil pesos pero con una compensación de 17 mil pesos.
En tanto que el agente contratado en Quintana Roo obtiene mil 200 pesos por tal estímulo y sueldo de apenas cuatro mil pesos.
Esta situación ocasionó un paro general de labores de los agentes ministeriales en la Zona Norte y Sur del estado.
Los agentes exigen trato y condiciones laborales similares a las de los agentes provenientes de la Ciudad de México, que llegaron apenas el año pasado a la Fiscalía General del Estado (FGE), y que gozan de compensaciones elevadas, vehículos e insumos sin retrasos.
Durante la protesta trascendió que son aproximadamente 80 trabajadores que se incorporaron a la FGE el año pasado y todos gozan de estímulos y beneficios superiores a los que perciben los elementos quintanarroenses.
Según los elementos provenientes de la Ciudad de México, que son ex agentes de otras fiscalías, de menor rango ganan hasta 25 mil pesos quincenales.
Además, cuentan con vehículos y combustible a su disposición cuando le requieran. Lo mismo ocurre con armamento y aditamentos para el desempeño de sus funciones.
Los inconformes argumentaron que ellos carecen hasta de uniformes y sus armas están descontinuadas o con falta de mantenimiento, y no garantizan funcionamiento en una situación de riesgo.