Por Javier Chumacero/NOTICARIBE PENINSULAR
COZUMEL.- Un elemento de la Policía Estatal de apellido Gardona lesionó al periodista Francisco Javier Díaz, y personal de la Guardia Nacional persiguió a otro reportero quien volaba un drone. Ambos fueron esposados y detenidos en una patrulla.
Por tal motivo, el reportero afectado pidió la intervención de la gobernadora Mara Lezama, ya que sólo se encontraba cubriendo un homicidio, sin romper con los protocolos de seguridad.
“Este elemento me ordenó retirarme del lugar, luego intentó quitarme el teléfono celular porque estaba grabando en vivo. Hubo un momento en que al llevarme esposado, tropecé y caí y el policía cayó poniendo su rodilla sobre mi pecho”, relató Francisco Javier.
Incluso comentó que escuchó cuando el policía estatal hablaba con su superior por radio, acusando al periodista de “ultrajar a la autoridad”.
Agradeció la intervención del comandante Mario Góngora, quien hasta en dos ocasiones le pidió a Gardona que dejara trabajar a los periodistas. Minutos después un grupo de reporteros se metieron a una papelería, y personal de la Guardia Nacional le ordenó a la propietaria que cerrara su negocio.
Con base en lo anterior, hoy interpondrá el trabajador de la radio 107.7 y del canal 5, una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos. “Tengo tres dedos lesionados de mi mano izquierda que no los puedo mover”, lamentó el reportero.