Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CIUDAD DE MÉXICO.- Profesores frente a grupo, directores de educación básica y especialistas en temas educativos coincidieron que a corto y mediano plazos será muy difícil un regreso a clases presenciales, ya sea en educación básica o superior.
En todos los niveles educativos, indicaron, enfrentan el mismo problema, no es sólo el deterioro de la infraestructura y si hay o no agua, también cuenta la movilidad de alumnos y docentes, y todas las interacciones que se realizan como parte de una comunidad escolar.
Luego que el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, señaló que existen pocas posibilidades de un retorno a clases presenciales en agosto, el cual podría concretarse hasta septiembre, si existen las condiciones sanitarias, Francisco Bravo, profesor y director de educación primaria, señaló que “será muy difícil que para este 10 de agosto –fecha referencial propuesta por la Secretaría de Educación Pública (SEP)– se tenga un regreso presencial a la escuela”.
En entrevista con este medio indicó que no sólo se deben alcanzar las condiciones de seguridad epidemiológica establecidas por la SEP, –no habrá retorno a las aulas hasta estar en color verde del semáforo de riesgo– y establecer nuevos protocolos en los planteles. Lo central es analizar qué contenidos debe enseñar la escuela en este contexto, qué puede resultar más significativo para nuestros alumnos y cómo vamos a enfrentar estos nuevos desafíos. La epidemia nos cambió a todos, y también a la escuela.
Incertidumbre
Roberto González Villarreal, profesor-investigador de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN)-Ajusco, destacó que en la educación superior también existe mucha incertidumbre. Al igual que en otros niveles educativos, en las aulas universitarias hay una enorme interacción y mayor autonomía en la movilidad de los estudiantes, quienes en muchos casos deben cubrir trayectos hasta de dos horas para llegar a sus campus, por lo que no basta con tener medidas de control de acceso, registro de temperatura y uso de gel antibacterial. Se necesita una transformación de fondo, que impone nuevos desafíos.
Explicó que tras aplicar una encuesta a alumnos de la UPN-Ajusco, detectaron que muchos estudiantes ven a sus universidades como una segunda casa, donde es posible el acceso no sólo al aprendizaje, también a herramientas básicas como computadoras, libros e incluso alimentación.
Muchos jóvenes ven a la universidad como espacio de protección, de escape a la violencia que viven en casa, y al acceso a servicios esenciales, como el Internet, pese a que la red en los campus universitarios aún es muy deficiente.
En tanto, maestros frente a grupos de Guerrero destacaron que en las comunidades rurales existe mucho temor al contagio del Covid-19. En la región de la Montaña y la Costa Chica, las escuelas no abrirán si no hay consenso de las comunidades, donde además se enfrenta una enorme carencia de servicios de salud. Nadie quiere poner a sus hijos en riesgo, así que más allá de las fechas oficiales, cada comunidad tendrá que definir si hay o no un regreso a clases.
Con información de La Jornada