Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
TULUM.- Dios pone reyes y voy a rezar por ti, le dijo un abuelito al candidato a la presidencia por Movimiento Ciudadano, Jorge Portilla Mánica.
Y también en el pueblo de San Pedro, otro con cuarenta nietos, le expresó: “no nos falles cuando seas presidente, sabemos que cumples tu palabra, tú nos ayudaste para que tuviéramos luz, solo queremos un parque para que jueguen nuestros niños, el presidente intruso, que ahora anda en campaña, nos los prometió, ahora dice que nuestro pueblo no cuenta y no ha venido a pedirnos el voto”.
Y en San Juan, otra comunidad que se volcó en favor del candidato de movimiento naranja la gente le repetía que desde hace muchos años “nos abandonaron totalmente, si nos enfermamos tenemos que ver como le hacemos para ir a Temozón o a Valladolid, llevamos tiempo pidiendo un domo para el parque y unas canchas de usos múltiples para que jueguen nuestros hijos, nadie nos hace caso”.
Y las plegarias del hombre de San Pedro resonaron en domo de Cobá sur, lugar en el que una multitud inconforme “porque Tulum se esta yendo abajo” recibió con cariño y alegría Jorge Portilla Mánica.
El sol era agobiante pero la camaradería entre el candidato de los naranjas y los ciudadanos y ciudadanas de esta ancestral población era reconfortante, tal vez por eso Portilla uso la frase del presidente “el pueblo pone y el pueblo quita” en su discurso.
Y es que él tiene claro que el destino de Tulum pasa por la participación de la ciudadanía en la determinación de que es lo que hay que hacer en cada comunidad o en la cabecera municipal “no vamos a poner ni una piedra sin el consentimiento de la gente, ustedes saben lo que necesitan y eso es lo que haremos en el gobierno humanista y de los ciudadanos que vamos a instaurar”.
Es tiempo de cambiar el rumbo, de ir a una sociedad con mayor justicia, proclamó.
Portilla ya ganó: respondió en coro la multitud.