Javier Chumacero/NOTICARIBE PENINSULAR
PLAYA DEL CARMEN.-Para frenar acciones de los desarrolladores inmobiliarios que donan áreas fraccionadas que no son útiles para la ciudadanía, se debería hacer más clara y específica la Ley de Acciones Urbanísticas.
Así lo propuso la regidora Fabiola Ballesteros, quien puso como ejemplo negativo a Cadu, que donó espacios en Villas del Sol que sólo son planchas de cemento, “cuando deberían haber sido parques y áreas recreativas para los habitantes de estos fraccionamientos”, precisó.
Por ello y aunque esta decisión le corresponde al Congreso del Estado, la edil panista ya solicitó al Cabildo una reforma al reglamento de Equilibrio Ecológico y Protección Ambiental, para que la instrucción sobre las áreas de donación tenga una mayor claridad.
Actualmente la normatividad estatal establece que “entre un 15 y un máximo del 20 por ciento”, de la superficie total en el que se construirá un fraccionamiento, deberán pasar al patrimonio municipal con el propósito de tener áreas que sirvan para la reconstrucción del tejido social y el cuidado al medio ambiente.
Ballesteros planteó la posibilidad que sean los 361 comités comunitarios, los que decidan el destino de esa área de donación, con lo que el gobierno municipal sólo sería un gestor. “No queremos que estos espacios sean tan inservibles que se conviertan en basureros clandestinos”, acotó.