Por Tony Rivero/NOTICARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- Este domingo 31 de mayo concluyeron en el Poder Legislativo los dos periodos ordinarios de trabajos del primer año, en el que el Congreso se caracterizó por sus diferencias y desacuerdos que prácticamente han bloqueado la posibilidad de avanzar en reformas que los legisladores prometieron en campaña antes de ocupar su curul.
En gran medida el trabajo de este Poder Legislativo ha sido avalar las reformas que ha enviado el Congreso de la Unión para modificar la Constitución general del País, pero en el ámbito local, no hay reformas en materia constitucional ni en Leyes trascendentales para la vida de los quintarroenses, salvo la reforma sobre Responsabilidad Patrimonial del Estado.
Así se han quedado en el tintero reformas prometidas como la Ley de Movilidad, la Ley “Casitas”, la Ley Orgánica del propio Congreso y un sinnúmero de reformas constitucionales.
Además, en estos dos periodos ordinarios marcados por la Constitución, básicamente se han presentado puntos de acuerdo y exhortos a autoridades estatales y federales, pero que en la práctica, no han dado resultados comprobables.
Cabe destacar que el Poder Legislativo ha sido víctima de las diferencias de sus propios legisladores, incluidos los del grupo mayoritario de Morena, que no han logrado ponerse de acuerdo y cuyo principal órgano de gobierno, la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo) ha tenido que cambiar en dos ocasiones de presidente y se frustró un tercer cambio que no lograron concretar a raíz de la emergencia sanitaria que obstaculizó llevar a cabo el trabajo parlamentario ordinario.
Basta recordar que durante la sesión de instalación los legisladores se enfrentaron al grado de que la bancada de Morena tomó la Mesa Directiva del Congreso con una Ley abrogada, lo que llevó al parlamento a reconocer su error y reponer la sesión posteriormente para apegarse a la legalidad.
Otro episodio que marca los trabajos de la XVI Legislatura fue el enfrentamiento entre legisladores que llevó a un conato de violencia que protagonizó el diputado del PT, Hernán Villatoro Barrios, al lanzar un golpe al legislador del PRI, Carlos Hernández.
Un episodio más fue la última sesión antes de la emergencia sanitaria en donde los diputados de Morena, abandonaron el salón de plenos, e incluso, el presidente de la Mesa Directiva, Gustavo Miranda, del PVEM, abandonó su puesto y fue la diputada Judith Rodríguez Villanueva quien tuvo que decretar la falta de quórum y cerró la sesión.
Este domingo los legisladores llevaron a cabo dos sesiones ordinarias en las que presentaron de última hora, una veintena de iniciativas y exhortos, los cuales serán abordados en el siguiente periodo de sesiones que inicia el 5 de septiembre o, de llegar a un acuerdo, podrían convocar a uno o varios periodos extraordinarios de sesiones.
Cabe destacar que este domingo, los legisladores rechazaron por mayoría con una votación de 16 a ocho, no debatir ni someter a votación una modificación legal para proteger a personal médico de agresiones, presentada con carácter de urgente pero que fue turnada a las comisiones de Justicia, Salud y Seguridad, para posterior análisis.