Por Leslie Gordillo/Noticaribe Peninsular
CANCÚN.- Luego de la declaración de emergencia sanitaria por COVID-19 y ante la ausencia de comensales, cada vez más restaurantes han decidido cerrar sus puertas. El 95% del gremio cerró, aunque aún hay actividad de algunos a través de plataformas digitales y a domicilio.
De acuerdo con información proporcionada por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), la contingencia sanitaria ha provocado el desplome de más del 25% de las micro y medianas empresas restauranteras en Cancún.
“Con el desplome de más del 25 por ciento de las micro y medianas empresas restauranteras… muchos de los agremiados de la Canirac pasando la contingencia no abrirán”, lamentó Marcy Bazaleel Pacheco, presidente de la Cámara.
Aunado a ello dio a conocer que la industria restaurantera compra 100 mil millones de pesos de insumos a empresas y productores nacionales en un año. De estos, el 56% está relacionado con insumos agrícolas, por lo que también se verán afectados.
“De los insumos agrícolas, el 85 por ciento lo compramos a empresas transformadoras y comercializadoras que generan empleo y a su vez compran a productores. Una parte importante de nuestros proveedores también son micro, pequeñas y medianas empresas”, añadió.
De acuerdo al Laboratorio Nacional de Políticas Públicas, CIDE, con datos de la Matriz Insumo Producto del Inegi, los insumos relacionados con el agro, se compran de la siguiente forma: 24% al comercio al por mayor; 19% a unidades económicas que elaboran pan y tortillas; 17% a la industria de bebidas; 11% a procesadores de carne.