Por Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN. – Cada vez circulan más unidades de transporte público en mal estado por la ciudad de Cancún, sin embargo, no es fácil retirarlas todas, porque se requiere de grandes inversiones y no se puede dejar a la población sin rutas.
Santiago Carrillo Sánchez, representante de Autocar, dio a conocer que tan sólo en la última semana 40 unidades tuvieron que irse al taller, por los daños que sufrieron tras las fuertes lluvias e inundaciones, aunado a que necesitarían más de 50 unidades para los corredores que están proyectando, aún así y pese al aumento del diésel, descartó de momento un alza a la tarifa.
“Se retiraron 40 porque nos golpeó muchísimo la lluvia; se metieron al taller porque la fuerza y altura del agua afectó los faldones de los autobuses. Tenemos 350 unidades y cubrimos 26 rutas… Las nuevas unidades tienen un costo de 3.6 millones cada una, es decir, se requieren 180 millones de pesos para comprar autobuses que economicen combustible y ya no contaminen; es decir, que funcionen con nuevas tecnologías”, expuso.
Respecto a los nuevos corredores que están proyectando, dio a conocer que se trazarían sobre Nichupté, Kabah y Tulum, los cuales ya están probando para ver qué tecnología se usa, porque tiene que ver con lo que tienen de ciudad, tal y como está, qué tipo de autobús sería el que pudiese trabajar.
“De hecho, estamos haciendo los corredores y “conectoras”, que son las que conectarían con los corredores, pero esas serían con otro tipo de unidad, mucho más pequeñas donde su radio de giro son menores. Ya todos tienen que ser con tecnologías nuevas por el costo del diésel; tenemos que buscar cómo abatir los costos por medio de la tecnología y también que dejen de contaminar”, indicó.
Respecto a rutas como la de la Unicaribe, afirmó que ya se restableció, aunque va de forma paulatina, conforme el retorno a las clases, los horarios y prácticamente con una cobertura de servicio especial, con horarios especiales se mandan autobuses; porque desafortunadamente otra problemática es la inseguridad en esa zona, que muchos operadores no quieren trabajar por ahí porque les quitan sus liquidaciones, por lo que mejor entran y sacar a los estudiantes y llevarlos hacia sus puntos de conexión.