Mario A. Millán Cabrera/NOTICARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- Más de 30 mil mujeres trabajadoras del hogar que viven en Quintana Roo desconocen los pormenores de la reforma a las leyes Federal del Trabajo y del IMSS que las incorpora a un nuevo esquema laboral con seguridad social y con todas las prestaciones de ley.
Aunque la normatividad federal así lo establece, los “patrones” siguen sin aplicarla y pagan a las empleadas domésticas cantidades inferiores a las que establece la Ley Federal del Trabajo y tampoco las inscriben en el seguro social.
Este segmento de la población laboral son los que en forma permanente prestan servicios o desempeñan actividades propias de la dirección, conservación y/o desenvolvimiento del hogar de una persona o familia, o participen en el cuidado de los miembros de la familia o de quienes convivan en el domicilio, o en trabajos de limpieza, según establece ley en la materia.
Además, tienen derecho a una alimentación sana y suficiente, el pago anual de 15 días de salario por concepto de aguinaldo o parte proporcional, según sea el caso; trato digno, respetuoso y amable y, sobre todo, respeto a su condición física, étnica, religiosa, económica y preferencia sexual.
Para que en Quintana Roo las trabajadoras y trabajadores domésticos tengan acceso a los beneficios de las reformas, la regidora de Othón P. Blanco, Lidia Rojas Fabro y la diputada Maritza Deyanira Basurto Basurto, ambas militantes activas del partido Movimiento Ciudadano y la titular de la Dirección del Centro Nacional para la Capacitación Profesional y Liderazgo de las Empleadas del Hogar A. C., Marcelina Bautista Bautista, trabajaron en un Punto de Acuerdo que la legisladora local pondrá a consideración de la XVII Legislatura del Congreso del Estado, a fin de exhortar a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y al Instituto Quintanarroense de la Mujer a verificar que la ley se cumpla a cabalidad.
Las reformas a las leyes Federal del Trabajo y del Seguro Social también están enfocadas a la no discriminación y a evitar la violencia laboral en contra de las empleadas del hogar, ponderando el respeto a sus derechos humanos, pero también a otros beneficios como el acceso a la vivienda.