Mara Lezama coronó ayer en Chetumal una metódica estratégica en la que se quedó sin adversarios.
Para quienes añoraran al “viejo PRI”, la abanderada guinda, mostró el músculo en la antigua Payo Obispo, con cientos de personas que la acompañaron en su registro ante el Ieqroo.
Pero, ayer fue el cierre de un largo proceso, en el que Mara se quedó “milagrosamente” sin adversarios.
Primero, el PAN jamás pudo o quiso perfilar aun abanderado que le diera continuidad al “gobierno del cambio”.
Y en las últimas semanas y días Marin optó por no registrase en la interna de Morena; a Roberto Palazuelos lo bajaron y Marybel Villegas finalmente se disciplinó.
Lo de ayer, más que un registro fue la marcha triunfal en la mismísima capital de Quintana Roo, de quien se perfila como la próxima gobernadora.