Por: Jorge A. Martínez Lugo
• Es buen Fiscal y “hombre bueno”; se merece un Consulado
Al cortar el listón, con la vista fija, a su mente vino el caso 9N; el feminicidio de Alexis; el de Victoria, muerta en Tulum por “excesivo uso de fuerza” de la policía.
El listón era blanco, pero él estaba muy distante del significado de esperanza, del Centro de Justicia para la Mujer en Cancún.
Oscar Montes de Oca, con el cambio de gobierno, sigue nadando de a muertito, con su indefinida sonrisa, esperando ser premiado en cualquier momento, como el mejor policía ministerial de México. A lo mejor hasta le dan un consulado, como a su jefe la embajada.
Justo en ese momento le pasó por la mente, como un relámpago, los balazos contra la manifestación y la quema de vehículos; Cancún en llamas, para imponer el miedo. Los procesos, en punto muerto; ¿vinculación a proceso?, ninguna.
En cualquier momento, en una de sus constantes visitas a Quintana Roo por el Tren Maya, López Obrador expresará, muy a tono con la transición de terciopelo e impunidad en Quintana Roo: “Ha hecho buen trabajo como Fiscal y es ‘hombre bueno’; se merece un Consulado”.
Todos los casos sin avances, con una impunidad de 98%. Pobre Quintana Roo, pedacito de cielo en la tierra, al cuidado de una Fiscalía con nivel de impunidad e incapacidad al top ten. Usted tiene la última palabra.