Mara Lezama ya lleva siete meses al frente del gobierno de Quintana Roo y su principal estrategia contra la desbordada delincuencia es la de generar una nueva Ley de Seguridad Ciudadana, que aún tardará algunos meses para que se implemente.
Hasta ahora, sus principales acciones han sido la de abrogar el Mando Único, creado por la administración anterior y al que se subordinó el ayuntamiento de Benito Juárez, cuando la comunicadora era alcaldesa de Cancún.
En el mismo tenor, la Gobernadora cedió a la policía preventiva a mandos la Armada, como parte de la estrategia nacional de subordinar las corporaciones locales al Ejército y a la Marina.
También se modificó la Mesa de Coordinación, que ahora se llama Gabinete de Coordinación, con José de la Peña, político del PVEM, al frente
En tanto, se decidió sostener como Fiscal General, a Oscar Montes de Oca, pese a al interior y al exterior de la 4T se había sugerido hacer un cambio tanto por su desempeño y resultados como por razones políticas.
Pero, la realidad, siempre supera las buenas intenciones. La delincuencia y la inseguridad parecen incontenibles y no sólo se trata de ejecuciones, rubro en el que, por cierto, se “rompió” el récord en abril.
El camino se sigue siendo cuesta arriba y las veladoras están encendidas en torno a la nueva la Ley de Seguridad.