Pese a que al PAN le pasó por encima un tráiler, no se ve un plan de control de daños tras el desastre del pasado 5 de junio.
En las elecciones anteriores de gobernador, el PAN se convirtió en la primera fuerza del estado, con el 33 por ciento de la votación.
Seis años después cayó a cuarta fuerza, con apenas el 12 por ciento de la votación.
Es decir, que de cada tres que votaron por el PAN en 2016, dos dejaron de hacerlo el pasado 5 de junio.
Y eso no es todo. Hace seis años, el PAN alcanzó seis diputaciones, incluidas victorias en cuatro distritos, y hace dos domingos apenas se llevó una “pluri”.
Sin embargo, nadie en el PAN dice esta es boca mía y, su dirigente estatal, Faustino Uicab, sólo ha asomado la cabeza para informar que su partido está buscando en tribunales una diputación “pluri”, que, por cierto, sería para él.