Para efectos, Quintana Roo está en pleno empleo en materia de turismo.
Es más, no sólo está Quintana Roo en pleno empleo en materia turística, sino que hay un déficit de plazas en hoteles y restaurantes.
Y es que uno de los efectos de la pandemia, en la que hubo despidos masivos. Sin embargo, ocurrió que muchos trabajadores se dieron cuenta que eran víctimas de una explotación salvaje por parte de las empresas hoteleras, por cierto, la mayoría españolas.
La falta de trabajadores es tal, que las empresas tienen que ir a otros estados para cubrir sus vacantes laborales.
En un gobierno de izquierda, van por adelante los trabajadores, seguido de empleos bien remunerados y., además, la consigna de mejorar la calidad de vida de los trabajadores.
Si los empleos de la “industria” hotelera son despreciados por los trabajadores, resulta un sinsentido ir a buscar inversiones.
¿Para que ir a buscar inversiones, si los trabajadores ya no quieres ese tipo de empleos?
La prioridad, y más para gobierno de izquierda, no son las inversiones abusivas, y mucho menos los inversionistas extranjeros, si no los trabajadores y empleos mejor remunerados.
Primero, lo primero, diría el clásico.