La XVII Legislatura poco a poco se consolida como la Legislatura de las ocurrencias y los despropósitos
Se requiere tener un Poder Legislativo, en el concierto de la división de poderes, pero la actual conformación del Congreso del estado sólo es un accesorio para la democracia de la entidad.
Los temas realmente importantes llegan desde el Poder Ejecutivo, mientras que el trabajo propio de la mayoría de los diputados va entre lo absurdo y lo ocioso, entre lo “políticamente correcto” y la pura “fachada”.
Este lunes, se marcó una de las jornadas más negras de la actual Legislatura.
El coordinador de la bancada de Morena, Humberto Aldana, se creyó diputado catalán, algo así como “Humbert Aldane” y, con el pretexto de legislar en contra de la explotación animal, de un plumazo, acabó con las festividades tradicionales mayas.
El legislador guinda como que se las da de muy progresista, pero en realidad actuó contra los mayas, es decir los verdaderos dueños de Quintana Roo y de la Península.
Se repitió la rutina morenista pura pose, pura forma y poco fondo.
Poco o nada han hecho la representación de Morena por los mayas, más que repetir los esquemas asistencialistas del PRI y del PRIAN, y ahora “Humbert Aldane”, se siente con la sabiduría para imponerse a los pueblos originarios y les viene a decir que deben de hacer o cuáles de sus tradiciones son correctas o civilizadas. Todo un delirio de grandeza.
Pero, además este despropósito fue avalado (que raro) por la oposición, la cual ha sido, más bien, comparsa en esta Legislatura.
Y por si fuera poco, este lunes del Congreso del estado, cerró con otra incongruencia, ahora de la oposición, del PRI, de establecer que la Lucha Libre es patrimonio intangible de Quintana Roo. Diría, el clásico: el chiste se cuenta solo.
Lo menos peor es que a la actual Legislatura le quedan algunas semanas.