Hace 176 años cuando la península era un país, un grupo de rebeldes mayas tomaron Tepich con lo que inició la Guerra de Castas, esta gesta no se reduce a una asombrosa rebelión de indígenas contra blancos.
La toma de Tepich derivó en una de las mayores proezas de la población nativa de América durante más de 50 años al Oriente de la Península de Yucatán se estableció el principal reducto de resistencia indígena de México y quizá de lo hoy es México.
Se consolidó un sistema político militar y religioso, casi un país dentro de otro país.
La guerra de Castas no sólo es Rebeldía , nostalgia y menos una página suelta de México, mucho menos, puede banalizarse como una curiosidad turística como parte de una competencia entre mercados.
La Guerra de Castas es nada más y nada menos que el origen de Quintana Roo lo cual, debe merecer el respeto de los que son o los que se dicen quintanarroenses.