NUEVA YORK.- Con las morgues y funerarias desbordadas por los cadáveres de las víctimas del coronavirus, Nueva York se queda sin opciones para enterrar a sus muertos.
Las funerarias de Nueva York están desbordadas, los camiones refrigerados se estacionan frente a los hospitales para recibir cadáveres, y un concejal neoyorquino revela un plan de emergencia para hacer entierros temporarios en un parque de la ciudad que el lunes registraba 4,009 muertos por el coronavirus.
Estados Unidos registró entre lunes y martes una cifra récord de muertos por la pandemia: 1939 en un día, y 398.809 casos de contagio confirmados.
Nueva York, el estado más golpeado por la enfermedad, registra 4.009 decesos, y el número total de fallecidos en el país ya supera los 12.722.
Philip Tassi advierte que el cementerio donde trabaja está desbordado de pedidos, pero aquí no hay tiempo para pausas: el gobierno de Nueva York acaba de anunciar que entre el lunes y martes se registró un nuevo récord de 731 muertes por el coronavirus en el estado.
“El número de solicitudes de entierros y cremaciones que tenemos está subiendo 300% probablemente”, dice Tassi sobre el camposanto de Ferncliff en Westchester, pocos kilómetros al norte de Manhattan.
Por ese crematorio pasan ahora hasta 20 cuerpos en jornadas laborales de 16 horas, los siete días de la semana. Pero incluso así, operando al máximo de capacidad, la agenda está colmada hasta fines de la próxima semana.
La historia se repite en otros lugares de Nueva York, el epicentro de la pandemia de coronavirus en Estados Unidos, el país con más casos confirmados de COVID-19 en el mundo.
“La mayoría de los cementerios no tienen unidades de refrigeración para una pandemia. Entonces, el problema más grande ahora es que no tenemos almacenamiento refrigerado para mantener los cuerpos aquí por largos períodos”.
Además, las autoridades se vieron confrontadas por las medidas para proteger a población vulnerable después de que un preso muriera en la prisión de Rikers.
Michael Tyson, de 53 años, falleció mientras esperaba una audiencia por un delito no criminal.
El estado de Nueva York sigue siendo el epicentro de la crisis de coronavirus en Estados Unidos.
Hasta el lunes, 286 presos y 331 funcionarios habían dado positivo por coronavirus en las cárceles de la ciudad de Nueva York.
El brote en el sistema penitenciario de la ciudad es uno de los peores en Estados Unidos, mientras el estado de Nueva York sigue liderando el país tanto en número total de casos como de muertes.
El récord de fallecidos llegó tras dos días en los que habían descendido las cifras.
“Necesitamos mantener la distancia social y quedarnos en casa. Muchas vidas dependen de ello”, dijo el gobernador Andrew Cuomo.
Cuomo ha ordenado ya liberar al menos a 1.100 prisioneros.
Tyson fue el primer preso en morir de COVID-19 en Rikers Island, una de las mayores cárceles de Nueva York.
Varias asociaciones criticaron al gobernador por no haber liberado a aquellos que son especialmente vulnerables al virus.
Tyson estaba en custodia desde el 28 de febrero por violar la libertado condicional en 2017, un error técnico por no reportar un cambio de dirección.
La organización Legal Aid Society había incluido a Tyson en una lista de 100 detenidos para los que se pedía su liberación. Se le consideraba de “alto riesgo” por su edad y por sus condiciones de salud.
Con información de BBC News.