A propósito de mayorías absolutas (por lo que está ocurriendo en el Senado), lo que sucede en la XVII Legislatura es una auténtica tragedia.
El dominio de las fracciones parlamentarias del morenismo es aplastante y la oposición, con sólo 4 diputados pasó a ser meramente decorativa.
Pero, no se debe de perder de vista que la hiper-mayoría morenistas está sobrerrepresentado. Los partidos que formaron la coalición Juntos Hacemos Historia obtuvieron en su conjunto el 57 por ciento de los votos, pero tiene el 84 % de la representación de toda la XVII Legislatura.
Si bien, a partir de su votación, los diputados de la 4T rebasan con 7 puntos el umbral de la mayoría simple, están casi a 10, de la mayoría absoluta, que, entre otros asuntos, se requiere para reformas a la constitución y nombramientos en organismos autónomos.
Pero, la hiper-mayoría morenistas (además subrepresentada), dejó fuera a la oposición, en las comisiones importantes, entre las que destacan las de Puntos Constitucionales y de Justicia.
De un total de 5 diputados, todos son de Morena y/o PVEM y/o PT en las comisiones importantes,
Es decir, que la operación morenista es cada vez más ilegitima y tiene el total control para, temas claves, como reformas a la Constitución del Estado y el nombramientos de los totales de los organismos autónomos.
El morenismo se dará un fiestón de autoritarismo.
Pero, en medio de esta tragedia, el “alivio” es que la actual Legislatura sólo durará dos años.