Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
GUADALAJARA.- Raúl Padilla lleva cuatro meses confinado y haciendo home office. En lo que va de la pandemia dos de los eventos que preside, el Festival Internacional de Cine Guadalajara y la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara están en veremos respecto a su realización. El primero tendría que haberse efectuado en marzo y el promotor cultural aún espera hacerlo en septiembre u octubre.
Para la FIL valora tres escenarios: presencial y con dos sedes; virtual; y la cancelación.
En cualquier caso, 2020 es un año es inédito por el encuentro editorial más importante de Iberoamérica. El festejo producto por la obtención del Premio Princesa de Asturias 2020 de Comunicación y Humanidades, junto con el Hay Festival, está en riesgo de verse empañado por el impacto del coronavirus.
Hace unos días, el Comité Organizador de la FIL de Guadalajara informó a los editores que confía en que para finales de noviembre Jalisco tendrá las condiciones necesarias para el encuentro sin exponer la salud de los asistentes. No obstante, también reconoce el riesgo de cancelarlo.
Crítico de las proyecciones del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell y en general de la forma en que gobierno federal ha manejado la pandemia, Padilla defiende la idea de su estado lo ha hecho mejor y prefiere pensar que a pesar de que sellos como Penguin Random House y Cal y arena anunciaron que no participarán, es preferible celebrar la FIL de Guadalajara a no hacerlo.
¿Cómo conciliar la celebración del Premio Princesa de Asturias para la FIL de Guadalajara con un año marcado por la pandemia y una grave crisis económica?
Ha sido un año muy difícil y para el sector cultural todavía más. La cancelación de actividades ha sido casi generalizada. En marzo, a ocho días de iniciar, pospusimos el Festival Internacional de Cine de Guadalajara. Nuestra decisión partió de la responsabilidad y la prudencia. Aún estamos monitoreando si lo realizamos en octubre o noviembre. Respecto a la FIL de Guadalajara el panorama es difícil. No obstante, creemos que incluso ante los pronósticos más pesimistas en noviembre podríamos llevarla a cabo.
Es optimista tanto con el Festival de Cine como con la FIL
Países que ya pasaron por la etapa más difícil de la pandemia no cancelaron eventos similares. En Europa las curvas de contagio van a la baja y eso les permite programar ferias y festivales importantes como la Feria de Frankfurt en Alemania, por supuesto con medidas de control sanitario. La Feria del Retiro en Madrid está en pie y programada para agosto. El Fashion Week de Londres se mantiene del 18 al 23 de septiembre a pesar de que Gran Bretaña fue uno de los países más golpeados por el Covid-19. Sucede lo mismo con la Feria Internacional de Arte Contemporáneo en París, en octubre. Art Basel de Miami se realizará en las mismas fechas de la FIL a pesar del rebrote en la ciudad. Ya comunicamos a los editores que creemos posible realizar nuestra feria con medidas de mucho saneamiento.
Y con una afluencia considerablemente menor
Solemos tener una asistencia de 800 mil personas y ahora prevemos 30 por ciento del promedio histórico. No permitiremos que en la Expo haya más de 5 mil personas al mismo tiempo. Es un espacio de más de 40 mil metros cuadrados así que con esta cantidad y adecuaciones en pasillos y stands mantendremos la distancia necesaria para evitar contagios. Será obligatorio el uso de tapabocas. Los salones no estarán ocupados por más del 25 por ciento de su capacidad y habrá sana distancia entre los ponentes. El programa será mixto: presencial y en streaming. Por única ocasión abriremos una sede alterna en el Centro Cultural Universitario con flujo regulado también.
También han planteado las opciones de una feria virtual o de cancelarla. ¿En qué caso sería cada una?
Estamos trabajando en la primera opción: hacerla con medidas sanitarias y una sede alterna. Pero no descartamos el formato virtual, posponerla a una mejor fecha en 2021 o de plano cancelarla para citarnos a finales de noviembre de 2021. La decisión depende de los datos sanitarios medibles y concretos en las fechas cercanas a la feria. Jalisco es uno de los estados que mejor ha manejado la pandemia, aunque las últimas semanas no han sido buenas. En general la reapertura económica en el país se ha hecho muy mal. El sistema de semáforos del gobierno federal es una provocación a la generación de contagios. Hoy, Jalisco está en el orden de 300 o 500 contagios diarios, lo cual no es bueno, pero es manejable. Aún así, si a finales de octubre no estamos por debajo de 100 contagios diarios la decisión será cancelar o posponer.
Con casi medio año sin ferias y librerías cerradas, ¿la industria soporta los gastos que supone la FIL de Guadalajara?
Trabajamos sobre el escenario de hacer la feria del libro y para esto necesitamos contar con los participantes y los anticipos correspondientes que ya están fluyendo. La FIL de Guadalajara es autofinanciable, no tiene subsidio gubernamental. El apoyo de la Secretaría de Cultura no es superior al dos por ciento y ya nos dijeron que este año no aportarán. Nuestros recursos provienen de lo que pagan las editoriales por la renta de los espacios, los profesionales y el público. Este año daremos treinta por ciento de descuento a los editores entre otras facilidades. Entendemos que renten espacios más reducidos, pero también creemos que nos visitarán quienes más compran libros. La sede alterna será totalmente subsidiada. Quienes estén en Expo Guadalajara tendrán acceso a un espacio en el Centro Cultural Universitario e incluso a personal de la librería Carlos Fuentes para manejarles sus espacios. Queremos que la U de G haga todas sus compras para bibliotecas en el marco de la FIL. Invitamos a la mayoría de las universidades del país a que hagan lo mismo con el objeto de compensar la reducción de ventas. Creo que esto ayudará a que la muy golpeada industria editorial tenga una leve recompensa por su asistencia. Somos conscientes de que este año podríamos tener números rojos.
Las estimaciones del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell apuntan a que la parte alta de la pandemia podría extenderse hasta octubre en Jalisco y Nuevo León.
Tras cancelar el Festival de Cine el gobierno federal nos exigió llevarlo a cabo o regresarle el apoyo. Por ahora está suspendido y todavía no ubicamos fecha para hacerlo. Con la FIL nos definiremos en octubre. Por otro lado, si hay pronósticos errados son los del señor López-Gatell. Lo lógico sería que Jalisco y Nuevo León tuvieran situaciones similares a la de la Ciudad de México. Los contagios llegaron por avión y Jalisco tiene dos de los aeropuertos más transitados. Gracias a las medidas tomadas por las autoridades el estado ha logrado controlar la situación. Aunque tenemos un mal manejo federal puede haber entidades como sucedió en Italia, con resultados mejores. Hay una buena relación entre la Universidad de Guadalajara y el gobierno estatal pese a que hace unos días hubo una diferencia porque querían aceptar el semáforo federal, lo que a nosotros nos parecía una barbaridad.
Hay editoriales grandes, medianas y pequeñas que ya cancelaron. Incluso Rafael Pérez Gay anunció en un artículo que Cal y arena no irá. ¿Cuántas han cancelado?
Hasta ahora muy pocas. Sensible y mucho, es la ausencia de Penguin Random House. Su medida obedece a su casa matriz, Bertelsmann, que decidió en lo que resta del año no ir a ninguna feria, incluyendo Frankfurt. Respetamos la decisión, pero no nos parece lo más acertado. Lamento que no asista Cal y arena. He platicado con Rafael Pérez Gay y creo que su decisión se debe a una crisis previa que ahora se acentuó. Aun así, no descartamos que si realizamos la feria asista, aunque sea con su catálogo.
¿Qué sucederá con las editoriales que den su anticipo si al final no se realiza la FIL?
Les vamos a regresar el cien por ciento de los pagos o anticipos realizados. Algunas han pedido que los esperemos para ver cómo se desenvuelven las cosas y por supuesto lo haremos. Oficialmente no son arriba de cinco las que nos han cancelado. Esto nos alienta, como también nos alienta haber recibido el Premio Princesa de Asturias.
¿Ve el escenario de una feria virtual?
No soy simpatizante de las ferias virtuales. Me dedico a las industrias culturales y sé que representan una ventana de oportunidad, pero en lo que corresponde al libro creo que no es lo mejor. El libro se mantiene más vivo que nunca y cohabita de manera conveniente con lo digital.
¿De qué tamaño sería el impacto económico de no hacer la FIL de Guadalajara?
El mayor impacto económico es para la ciudad. Genera una derrama al sector turístico de cerca de tres mil millones de pesos. Calcular el impacto en la industria editorial no es fácil porque los sellos son muy celosos al dar sus números. Por medio de encuestas calculamos que entre las ventas al público y a profesionales las editoriales en su conjunto obtienen entre 800 y mil millones de pesos de ventas. En Guadalajara se dan cita 20 mil profesionales que hacen transacciones importantes incluyendo ventas corporativas. Cerca de 5 mil bibliotecas estadounidenses viajan a Guadalajara para comprar títulos. Este año dadas las condiciones se podría alcanzar el sesenta por ciento de estas cifras.
Rafael Pérez Gay les pidió abiertamente que no realicen la FIL
No comparto la opinión y la forma en que Rafael Pérez Gay nos insta a cancelar ya. Probablemente tendremos que cancelar, no sabemos. Pero no tenemos porqué hacerlo a cinco meses. No comparto sus puntos de vista, aunque sí suscribo su crítica a la desatención gubernamental al libro. Ahora podemos hablar de un número no menor de editoriales muchas de ellas con tradición, que producto de la pandemia tal vez desaparezcan.
¿Editorial que no pueda asistir este año a la FIL perderá su lugar en 2021?
No, la feria vive por y para la industria editorial. Quien no pueda asistir o cancele no perderá su espacio. Si alguien da su anticipo para apartar lugar y después desiste, recibirá su dinero con una multa mínima. Y si nosotros cancelamos lo recibirá de manera íntegra.
¿Qué pasará con el Sharjah, el Emirato Árabe invitado?
Hasta ahora no lo sabemos. Sharjah es uno de los Emiratos Árabes más ricos. Por el momento nos confirman su asistencia, pero sí advirtieron que su presencia será más modesta porque la pandemia les ha generado muchos gastos. Nos ponen en la mesa la posibilidad de ir en 2021 o 2022 con toda la fuerza que pretendían traer. No sé si sea posible dado que ya estamos en pláticas con otros posibles invitados.
¿Los módulos internacionales, incluyendo la presencia latinoamericana se mantienen?
No hemos tenido cancelaciones, pero los europeos evalúan el tema del transporte. Los latinoamericanos nos piden en cambio, manejar sus fondos editoriales y lo vamos a hacer con mucho gusto. Tenemos ejércitos de universitarios voluntarios.
¿La pandemia aceleró la crisis de las industrias culturales, incluyendo la editorial o en generó una nueva crisis?
En días pasados con un dejo de cinismo, el señor López-Gatell dijo que los gobiernos neoliberales nos dejaron el sistema de salud por los suelos. Esa es una falsedad. Efectivamente en los últimos años de la administración de Peña Nieto se descuidó la salud y la cultura. Tenemos que lamentar que nuestras instituciones venían de un sexenio de merma, pero en un año y medio, los gobiernos neoliberales se quedaron cortos respecto a este. Nunca el sector cultural había pasado por una situación tan complicada. La pandemia agudizó los problemas, pero los desequilibrios se acentuaron con la Cuarta transformación.
¿Qué porcentaje da para cada uno de los escenarios posibles para la FIL?
Hoy me quedo con 40% presencial; 20% virtual; y 40% cancelar. Tengo que reconocer que en los últimos días la situación ha empeorado, pero faltan cinco meses. Los pronósticos de López-Gatell son inexactos y están llenos de errores y tropiezos. En octubre tendremos la decisión definitiva. Sin descartar la posibilidad de que llegue una vacuna antes de lo esperado. Lo que sí te aseguro es que no contribuiremos a más muertes.
Con información de Aristegui Noticias