Especial/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN. – La desaparición del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), no solo dejó en la “indefensión” a Cancún, principal generador de divisas turísticas del país, sino que terminó -en tiempos de la 4T-, en un remedo de privatización en un silencioso y opaco proceso que pone en riesgo la operatividad de los servicios y la atracción de inversiones.
Así como Fonatur cedió en condiciones poco claras al Gobierno del estado de Quintana Roo facultades para hacerse cargo de los trabajos de mantenimiento (plantas de tratamiento), y limpieza de la Zona Hotelera del centro vacacional, más confusa es la actual operación en manos del “gobierno estatal”.
En los más de seis meses que transcurrieron desde el traspaso, salieron a relucir algunos nombres de empresas, entre ellas Zeit Edificaciones, que estarían al frente de actividades cotidianas en los más de 25 kilómetros que comprende la zona de playas, incluyendo las plantas de tratamiento.
Pero, lo mas extraño y confuso es que Zeit Edificaciones solo estuvo de manera temporal pues la razón social de la empresa cambia cada tres meses.
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La Historia
Fonatur atendió el primer Centro Integralmente Planeado (CIP), por más de 50 años, tiempo durante el cual Cancún se consolidó como marca mundial y como el destino turístico más exitoso de América Latina, con una oferta actual de más de 45 mil habitaciones de hotel y la recepción en promedio de más de seis millones de turistas al año.
La presencia del Gobierno federal, a través de Fonatur, es decir desde una entidad pública del estado mexicano, fue una garantía para la calidad en el mantenimiento e imagen de la Zona Hotelera, desde su fundación
“La privatización es corrupción”
Pero, al cumplir Cancún 54 años, las cosas parecen cada vez más inciertas sobre la forma en que se dará atención a la Zona Hotelera, con la “liquidación” paulatina de Fonatur.
La política de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha sido la de ir en contra de la privatización, inclusive, promovió la intención de cancelar la concesión del servicio de agua potable y alcantarillado que desde hace varias décadas presta la empresa Aguakán en el norte del estado de Quintana Roo.
En su habitual conferencia mañanera, el presidente de México comentó sobre el tema: “nuestro proyecto es opuesto a eso”, haciendo referencia también a la privatización de la educación, de Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Además, en reiteradas ocasiones ha dicho que “privatizar es sinónimo de corrupción”.
Durante la actual administración federal, junto con Fonatur también desaparecieron otros organismo que brindaban apoyo y respaldo vital a la actividad turística, entre ellos el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM).
Propuesta de Fideicomiso
El secretario de Finanzas y Planeación de Quintana Roo (Sefiplan), Eugenio Segura, afirmó en febrero pasado que “en dos semanas” estaría listo el fideicomiso a cargo de la operación y mantenimiento de la zona hotelera de Cancún, además de Cozumel y Mahahual, sin que hasta ahora se tenga conocimiento alguno sobre el plan.
También subrayó que a partir de 2025 el gobierno del estado dispondrá y manejará en exclusiva el destino de los recursos para el mantenimiento de la zona de playas.
Añadió que para 2024 cuentan con 155 millones de pesos de una partida del Fonatur.
Agregó que el presupuesto del fideicomiso para el ejercicio del 2025 provendría en partes, del Impuesto al Hospedaje y el derecho de Saneamiento Ambiental de Benito Juárez, aunque dichos recursos se etiquetaron de origen para otros fines.
El propio secretario de Turismo, Bernardo Cueto, habló en su momento sobre el posible nombre tentativo que darían al fideicomiso – Fondo Estatal de Fomento al Turismo (Fonatur)-, con participación de la iniciativa privada y el gobierno de la entidad.
La dura realidad en los tiempos de la 4T
Sin embargo, de acuerdo con información recabada, en medio de la incertidumbre que priva entre la base trabajadora por el incumplimiento de condiciones laborales y la precariedad en la que trabajan, hasta ahora se sabe de empresas que estaría a cargo de las operaciones cotidianas en la zona hotelera del destino, como es el caso de Zeit Edificaciones, como consta en un documento en poder de este medio.
Además, contrario a lo que afirmó con anterioridad el secretario de Finanzas, al asegurar que el gobierno del estado contrató a los 200 empleados de Fonatur; de acuerdo con la información obtenida, el número de trabajadores, al parecer, no llega ni a 100 para todas las actividades de operación y cuidado de la imagen del centro vacacional.
Opacidad, secrecía, hermetismo…
Julián Ricalde Magaña, presidente de la comisión de Turismo y Asuntos Internacionales, del Congreso del Estado, afirmó que no tienen noticia alguna sobre el tema Fonatur, ni del fideicomiso y el ejercicio de las funciones estatales.
“El proceso de desaparición del organismo y el traspaso de funciones al gobierno del estado se hizo con tal hermetismo, que sólo estamos al tanto de lo que hemos visto en la prensa”.
El también ex alcalde del municipio de Benito Juárez, cuya cabecera es Cancún, afirmó que todo se maneja con secrecía,
“No quieren hacer público lo público”, dijo.
Explicó que, aunque desde el Congreso del estado no tienen facultades en términos de operatividad, tampoco están al tanto de cómo se configuró el nuevo esquema de operación.
“No sé cómo operan y tampoco conozco a ninguna persona de los que están ahorita al frente”.
Municipio privatizado
A lo largo de los tiempos del PRI, y luego en la sociedad PRI-PVEM , es decir en los tiempos del “neoliberalismo” se fueron privatizando los servicios públicos de municipio de Benito Juárez (Cancún).
En la actualidad, en esta ciudad de más de un millón de habitantes están privatizados los servicios de transporte urbano, agua potable, recolección y disposición final de la basura y alumbrado público.
Y ahora, la 4T persiste en el modelo neoliberal “de privatizar lo público” en la Zona Hotelera de Cancún