Lo del 9N ya se hizo un xé’ek.
La conmemoración del desastroso operativo policiaco contra feministas tuvo este domingo la suma de otros agravios, incluidos algunos que dejó la vacilante y apolítica administración estatal anterior.
En el arranque de las actividades para conmemorar el 9N realizada ayer en la Plaza de la Reforma del 9N se sumaron familiares de desaparecidos y choferes de Uber.
Es decir, hay asuntos no resueltos que siguen acumulados.
Urge una mesa de diálogo en Cancún para estos “viejos” conflictos” y los “nuevos”, como la rebatinga en el transporte urbano.
La Secretaría de Gobierno y Cristina Torres ya deben de ampliar su espectro a Cancún.
Son asuntos serios y se requieren más que bomberazos al estilo Mahahual.