Agencias
CHETUMAL.- Menor de cinco años murió de un disparo de arma de fuego que al parecer se hizo de manera accidental en un rancho de Oxtankah, al sur de Quintana Roo.
De acuerdo con información preliminar, de manera accidental un niño de cinco años se disparó con una escopeta y terminó con su existencia; el caso es investigado por la autoridad correspondiente.
La tragedia se registró este miércoles en un rancho ubicado en las inmediaciones de la zona arqueológica de Oxtankah, en el poblado de Calderitas, Othón P. Blanco.
El tío fue quien encontró al niño en el interior de la vivienda del rancho y dio aviso al número de emergencias 9-1-1.
Según datos a los que se tuvo acceso, el menor cuando lo encontraron estaba tirado en el piso, con sangre en la cabeza y sin vida.
Aunque pudo tratarse de un accidente, se inició una carpeta de investigación por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE), pues podría configurarse el delito de homicidio imprudencial.
El Servicio Médico Forense (Semefo) se hizo cargo del levantamiento del cuerpo para los fines legales conducentes.
De acuerdo con los primeros datos que proporcionaron las autoridades, el niño se disparó con una escopeta que fue dejada en un rincón de la casa.