Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CIUDAD DE MÉXICO.- La tasa de desocupación descendió de 2.9 a 2.5% entre enero y febrero de este año, con esto, el desempleo llegó a su nivel más bajo en los últimos 10 meses, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
A la par del buen desempeño de la desocupación, la generación de empleo recuperó su ritmo luego del tropiezo en el arranque del 2024. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que en febrero se crearon 492,132 puestos de trabajo.
En el segundo mes del año, un poco más de 235,000 personas salieron de la población desocupada; es decir, quienes no tienen un empleo, pero están en una búsqueda activa. En tanto, la inactividad laboral también tuvo una reducción, los “disponibles” para trabajar dentro de la población no económicamente activa (PNEA) disminuyeron en 277,105 personas.
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Estos movimientos se reflejaron en un descenso mensual en la tasa de desempleo extendido, la cual contempla a los desocupados y a los inactivos disponibles para trabajar, la cual pasó de 10.3 a 9.6% como proporción de la fuerza laboral potencial entre enero y febrero. Esta es la cifra más baja desde que comenzó a levantarse la ENOE en el 2005.
“Va muy en línea con la actividad económica que ha mostrado el país. Si bien parece que hemos tenido indicadores que reflejan cierta debilidad de la economía a principios de este año, sin duda el reporte de empleo nos muestra que puede ser un debilitamiento temporal”, señala Janneth Quiroz, directora de Análisis Económico, Cambiario y Bursátil de Monex.
Incluso con cifras desestacionalizadas la tasa de desempleo alcanzó un mínimo histórico al ubicarse en 2.58% y sumó tres meses consecutivos con descensos, destaca la especialista. “Posiblemente veamos esta tendencia en la primera mitad del año, que continúe disminuyendo la tasa de desempleo, especialmente si consideramos que en el período electoral aumenta el empleo temporal, lo que podría propiciar la tendencia a la baja”.
En eso coincide Víctor Gómez Ayala, director de Analítica de Datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). “Pese a que la economía mexicana indica que está en un proceso de desaceleración, se mantiene en expansión y la tasa de desocupación tiene un comportamiento contrario; es decir, mientras la economía crezca por arriba de su potencial, es esperado que la desocupación esté en los niveles que observamos”.
Por su parte, la creación de empleo del mes estuvo concentrada en su mayoría en la economía informal. El 97% de las nuevas plazas se concentró en la informalidad, con un total de 476,607 empleos en esta condición; sólo 15,525 personas consiguieron un trabajo en la formalidad.
Como resultado de esto, la tasa de informalidad tuvo un crecimiento mensual de 0.4 puntos porcentuales para ubicarse en 54.5% de la fuerza laboral, éste fue el segundo mes consecutivo con incremento.
“Estamos viendo un aumento en la confianza en la actividad económica, el sector informal suele ajustarse cuando hay mayor preocupación o signos pronunciados de desaceleración, pero el que veamos un crecimiento en la informalidad, refleja confianza en la actividad económica. Es importante acotar que si bien vimos un incremento del sector informal, no es el máximo, habíamos visto niveles más pronunciados en octubre y noviembre del año pasado. Pero en el sector formal también se ve estabilidad”, expone Janneth Quiroz.
En el caso de la subocupación, que engloba a las personas con necesidad de ofrecer más horas de trabajo que las que el mercado laboral les garantiza, se observó un descenso de 7.6 a 6.5% y con ello, se ubicó en su cifra más baja desde marzo del 2023, según los registros del IMCO.
“Tenemos a un porcentaje importante de la población buscando activamente trabajo con la capacidad de encontrarlo. Ahora, lo que deberíamos preguntarnos ya que encontraron el empleo es ¿En qué condiciones lo están encontrando? Y ahí es donde tenemos que analizar las cifras de subocupación y de informalidad”, señala Víctor Gómez.
Industria y servicios impulsan el empleo
Por actividades económicas, el sector industrial encabezó las ganancias con una creación total de 573,730 plazas, esto fue el balance del dinamismo observado en la manufactura donde se generaron 631,651 puestos laborales y una pérdida de 140,763 ocupaciones en el subsector de construcción.
Las actividades de servicio fueron el segundo motor de la generación de plazas con un acumulado de 432,719 ocupaciones. La mayoría de los subsectores tuvieron cifras positivas, destaca la creación de empleo en el comercio, restaurantes y servicios profesionales, sólo las actividades en servicios sociales y servicios diversos reportaron pérdida de ocupación.
Por otra parte, el sector agrícola fue el único que tuvo un comportamiento general negativo, las actividades primarias eliminaron casi 400,000 puestos de trabajo. Con ello, su nivel de ocupación descendió por debajo de lo observado en el cierre del 2023.
Los especialistas coinciden en que el mercado laboral mantendrá un buen dinamismo en los siguientes meses, aunque la informalidad se mantiene como uno de los retos, lo deseable es que el crecimiento del empleo se concentre más en la formalidad.