Lo que ocurre en el PT es como una comedia de enredosos, pero con toque de western.
Aunque, de entrada, es necesario establecer que el PT en Quintana Roo es un partido sobrevaluado y ha vivido a expensas de otros, antes del PRD y ahora de Morena.
En las elecciones de 2021, el PT apenas obtuvo el 3 por ciento de los votos, pero alcanzó tres diputados (de mayoría) que le dieron el 12 % de la representación del arco del Congreso del estado. Es decir, además de sobrevaluado, llegó sobrerrepresentado en 400 por ciento.
Pero, el PT ha sido el resquicio para que políticos que no han tenido cabida en Morena o el Verde, ingresen, aunque sea por la puerta de atrás, a la Cuarta Transformación, que equivale a casi asegurar un cargo de elección popular.
Al PT le tocó “siglar” el municipio de Lázaro Cárdenas en el reparto de las candidaturas a 10 presidencias municipales entre los cuatro partidos que conforman la versión local “Seguimos Haciendo Historia”.
Y el “elegido” fue el expriista Ismael “Mayito” Moguel, que no tenía ninguna vinculación con el PT. El empresario se impuso a su archienemigo Nivardo Mena, entre otros competidores.
Justo antes de la entrega de candidaturas, le dieron las gracias a la regiomontana Patricia Casados como delegada del Partido y en su lugar llegó el “chilango”, Gerardo Rodríguez.
Con estos cambios de dirigencia, se formaron dos grupos, que son los que ahora protagonizan la zacapela por la candidatura de “Seguimos Haciendo Historia” en Lázaro Cárdenas y que tienen bajo los reflectores a “Mayito”, por un lado, y a Nivardo, por el otro.
Gerardo Rodríguez apoya a Nivardo Mena, que en 2018 alcalde por el PT, partido al que abandonó en pleno ejercicio como edil para irse al PRD.
Por su parte, Mayito, además de haber “ganado” las “encuestas” tiene el apoyo de la “22 de Enero”. Al mismo tiempo, tiene el aval de Morena, PVEM y el “nuevo” MAS.
En PT, no está solo, El empresario tiene el respaldo de José Luis Guillén, que viene del MAS.
¿Pero quién está detrás de Gullén? Los enterados señalan que la secretaría de Gobierno, Cristina Torres.
Se podría decir, que Gerardo Rodríguez, y su séquito de dirigentes municipales, en realidad estarían desafiando a Morena y a la gobernadora Mara Lezama.
El desenlace aún es incierto.
Pero, uno de los “finales” posibles es el rompimiento de la 4T y tomar sus pocas canicas (muy pocas) para irse con Nivardo, en el supuesto que el ex perredista le garanticen Lázaro Cárdenas y un “pluri”.
Y todo puede pasar en el mundo de la 4T.