Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CIUDAD DE MÉXICO.- La enfermedad de covid-19 dejó de considerarse de atención prioritaria en México a partir de ayer y se iniciaron las acciones para incluir la vacuna contra el coronavirus SARS-CoV en el Programa de Vacunación Universal. La Secretaría de Salud (Ssa) perfila que el biológico se aplicará cada seis meses o anualmente en niños y adultos con alto riesgo para el desarrollo de complicaciones graves y muertes.
Advierte que en México, la inmunidad de la población contra el covid es de más de 90 por ciento, sea por las vacunas recibidas, haber tenido la infección o la combinación de ambos factores y con base en la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, se seguirán usando los inmunógenos formulados con la variante original del virus.
Te puede interesar: México pone fin a la emergencia por pandemia del COVID-19
De esta manera, en el Plan de Gestión a Largo Plazo para el control de covid-19, la Ssa ratificó que no se requieren nuevas vacunas, en específico las bivalentes.
El Consejo de Salubridad General publicó un acuerdo en el Diario Oficial de la Federación, donde dio por finalizada la sesión permanente que mantuvo durante la emergencia sanitaria y estableció medidas relacionadas con el plan, entre otras que aunque covid-19 ya no es de atención prioritaria, las instituciones públicas de salud mantienen la responsabilidad de realizar las acciones necesarias para prevenir, controlar y mitigar el padecimiento causado por el coronavirus.
La disposición implica que también termina la posibilidad de que laboratorios obtengan licencias de utilidad pública para la producción de medicamentos protegidos por una patente.
El acuerdo exhortó a la Ssa a emitir el plan de gestión, lo que ya ocurrió. El documento contiene una serie de disposiciones sobre los distintos aspectos de la enfermedad.
Sobre la vacunación, señaló que todavía es limitada la evidencia sobre la pérdida de inmunidad –en el tiempo– de los esquemas primarios y la necesidad de refuerzos periódicos. No obstante, bajo un “principio precautorio” se considera aplicar los biológicos a grupos de alto riesgo: cada año adultos mayores y jóvenes con obesidad grave.
La Ssa ubicó en otro subgrupo a adultos “más ancianos” y aquellos con varias comorbilidades importantes para que reciban el biológico cada seis meses.
Enseguida están los adultos, adolescentes, y niños de seis meses y más con enfermedades que disminuyen su sistema de defensas, quienes se vacunarán cada seis meses, aunque la dependencia puntualiza que “el intervalo óptimo debe analizarse por el médico tratante”.
Para las embarazadas se plantea que la vacuna se administre una vez si pasaron más de seis meses de la dosis previa. Los trabajadores de salud que atienden enfermos de covid se vacunarán cada año.
El plan señala que la adquisición de los biológicos se continuará realizando a escala federal, y en estos días se realizará la estimación de compras para 2024.
En un apartado sobre el covid-19 prolongado, el documento indica que el conjunto de síntomas que pueden durar años y afectar la capacidad funcional de las personas, requiere de un tratamiento integral que incluya medidas de rehabilitación, ejercicios físicos y respiratorios; así como un enfoque general en la nutrición, el sueño y la reducción del estrés.
Plantea que un grupo de expertos analizarán la posibilidad de establecer una estrategia específica sobre este asunto y considerar aspectos como atención clínica, vigilancia epidemiológica, herramientas de evaluación clínica y seguimiento a largo plazo.
Con información de La Jornada